1-2: Salida a todo gas del Bilbao Athletic para llevarse el derbi

El Bilbao Athletic conquistó Zubieta para seguir con su línea ascendente y afianzarse en la zona noble del grupo. Le bastó con una salida a todo gas, pisó el acelerador y dejó atrás rápidamente al filial de la Real Sociedad. Encarriló el triunfo con dos goles en el primer cuarto del encuentro, después se dedicó a gestionar su renta sin sufrir en exceso.

Los cachorros desarbolaron a los locales a base de presión, verticalidad, pegada y un gran Nico Williams. El punta fue un martirio para los txuri urdin desde la derecha. Un dechado de virtudes al que solo le faltó el gol. Desmarques, velocidad, controles, asociación, diagonales… El Bilbao Athletic cargó su fútbol por la diestra e hizo daño a través del triángulo Núñez, Zarraga y Williams. Nico tuvo la primera clara tras desbordar a su par, aunque no definió bien. Aguirre respondió y se topó con la gran intervención de Agirrezabala en el mano a mano.

Williams castigaba por la banda y el primer gol tuvo su génesis en una acción de veterano por su parte. Utilizó su cuerpo para hacerse hueco y ganar la posición, luego encaró a Recio y le sacó la falta y una amarilla. Un libre directo desde el vértice derecho del área que aprovechó Zarraga tirando de picardía. Sorprendió con un disparo al palo corto, por abajo y ajustado. No se quedó ahí. Tres minutos más tarde, el segundo. Serrano centró desde la izquierda y el cabezazo de Urain, que no parecía que llevase dirección a portería, golpeó en la espalda de Arambarri y se alojó en la red.

Los de Etxeberria ahogaron en la presión a su rival, sin embargo el Sanse vio una luz y se agarró a ella gracias al tanto de Lobete justo antes del descanso. Todo se inició con una pérdida de Prados en el carril central fruto de la precipitación en el pase. Los donostiarras armaron un ataque rápido y preciso y recortaron distancias. Pero el Bilbao Athletic la tuvo al minuto siguiente. Williams emprendió la carrera desde el centro del campo, en la zona de banquillos, y se plantó ante Ruiz. Puso el temple para sortear rivales, aunque la cepa del poste repelió su intento.

Bajaron las pulsaciones en el segundo periodo. El partido careció de ritmo entre los percances que se fueron sucediendo y una escuadra bilbaína que le inyectaba cloroformo al juego. La Real gozó de más iniciativa, eso sí, sin generar excesivo peligro más allá de una clara oportunidad pasada la hora de fútbol. Paredes sacó en el área pequeña un disparo cruzado de Martín que olía a empate. Fue la única ocasión en esta mitad de unos y otros.

Arambarri lo intentó con un remate forzado tras una jugada de estrategia. Agirrezabala no se complicó para mandar a córner. El Bilbao Athletic estuvo algo más impreciso en el pase, sin estirar sus ataques, con lo que se veía obligado a centrar todos sus esfuerzos en defender. Sobrevoló la sombra de los puntos perdidos en los minutos finales de este curso, aunque esta vez los cachorros lograron retener la victoria.