Son muchas las franquicias que arrancan el curso en la liga estadounidense concienciadas de su pobre devenir a finales de temporada
La NBA cuenta con ocho plazas de playoffs para cada conferencia, en principio el objetivo inicial de todos los equipos al comienzo del año, un objetivo para muchos inalcanzable incluso antes de que el balón empiece a botar. Ahora, con el torneo play-in, todavía hay el incentivo añadido de colarse entre los diez primeros para intentar dar la sorpresa y meterse en la postemporada a mediados del mes de abril.
En octubre, y a escasas semanas del arranque de la competición, hay hasta cinco equipos por conferencia que saben de la dificultad de alcanzar las posiciones nobles de la tabla. Hacemos un repaso:
San Antonio Spurs
A por el número uno
Desprenderse de un All Star del calibre de Dejounte Murray no esconde las intenciones del joven grupo liderado por el veterano Gregg Popovich, que encara quizás su último proyecto de reconstrucción al mando de la franquicia. Su gran apuesta de verano es Jeremy Sochan, junto a otras dos jóvenes elecciones de primera ronda: Malaki Branham y Blake Wesley. En 2023, el número uno del Draft apunta al talento generacional Victor Wembanyama. Conseguir el francés, como ya hicieron con Tim Duncan y David Robinson en el pasado es la hoja de ruta marcada para ellos.
Sacramento Kings
16 años de sequía en contra
La estadística no engaña y, a pesar del nuevo proyecto liderado por Mike Brown y el badalonés Jordi Fernández, su técnico asistente, mucho deberán cambiar las cosas en California. Las piezas son adecuadas para intentar luchar contra lo inevitable: De’Aaron Fox y Domantas Sabonis tienen pedigrí de estrellas, jóvenes jugadores como Davion Mitchell y el número cuatro del Draft de 2022, Keegan Murray, puede dar competitividad al grupo. Quizás demasiado verdes, lo importante sería dar un paso al frente y ver dónde está el techo en las siguientes campañas.
Houston Rockets
Otro año formativo
Mucho talentos pero grandes agujeros en una de las plantillas más jóvenes de la competición. Juntar a Jabari Smith, Jalen Green y Kevin Porter Jr. es prometedor, pero una cosa es sobre el papel y la otra sobre la pista. En medio de todo ello, Usman Garuba deberá arremangarse para encontrar minutos en la rotación de Stephen Silas. Probablemente, a mitad de temporada se den cuenta de que lo mejor es volver a pasar por el Draft y ver qué pasa.
Utah Jazz
El gran borrón del verano
Seis temporadas consecutivas alcanzando los playoffs pero nunca superando la segunda ronda propiciaron el desmantelamiento del proyecto de Salt Lake City. Adiós Quin Snyder, el entrenador, y adiós a dos All Stars de calibre en Rudy Gobert y Donovan Mitchell. A cambio, un paquete de jóvenes con futuro en Collin Sexton, Lauri Markkanen, Malik Beasley y Talen Horton-Tucker, liderados por el entrenador más jóven de la competición, Will Hardy. La idea de la ejecutiva es amasar elecciones del Draft para completar la reconstrucción en los próximos años.
Oklahoma City Thunder
Las lesiones frustran la esperanza
Firmar al número dos del Draft, Chet Holmgren, trajo una oleada de esperanza a OKC. Desafortunadamente, una lesión compleja en el pie dejará a la joven perla KO toda la temporada, lo que en resumidas cuentas deja a la franquicia con el mismo grupo de antaño y, por lo tanto, las mismas malas perspectivas en la tabla (24-58 de balance y penúltimos del Oeste)
Washington Wizards
Beal al rescate
En la capital se fían del físico de sus dos frágiles estrellas, Bradley Beal y Kristaps Porzingis, para intentar recuperar un semblante de playoffs. Es probable que puedan estar en la conversación por el play-in si todo funciona y la suma de jugadores como Will Barton y Monte Morris añade profundidad al plantel de secundarios liderado por Kyle Kuzma y Rui Hachimura. Hay talento, pero falta pegarlo para que funcione según indica el prospecto.
Indiana Pacers
Insuficientemente malos
Aunque apunta a un proyecto con miras a la reconstrucción, la presencia de talentos como Myles Turner y Buddy Hield pueden evitar la acumulación masiva de derrotas. Probablemente, el objetivo más firme de los ejecutivos este año sea traspasarles por un buen puñado de rondas de Draft o jugadores jóvenes y prometedores, algo difícil en un mercado con muchos equipos en la misma línea. No perder demasiado puede complicarles la vida en la lotería del Draft de 2023, donde empezará del todo su construcción entorno a Tyrese Haliburton.
Detroit Pistons
El proyecto acelera
Cade Cunningham tuvo un año de novato que confirmó las mejores expectativas. Puede ser estrella en la liga y este verano los Pistons han añadido más madera joven con el número 5 del Draft, Jaden Ivey. La mezcla de promesas y veteranos es prometedora, y quizás este curso se recuerde como el primero en que Detroit demostró su verdadero potencial de futuro.
Orlando Magic
Con el número uno a cuestas
Paolo Banchero, número uno del Draft de 2022, empieza a dar forma al joven proyecto de los floridenses. Junto a Franz Wagner y Jalen Suggs, número cinco del Draft de 2021, forman un trío muy interesante rodeado de veteranos fiables como Gary Harris, Terrence Ross y Wendell Carter Jr. No es para tirar cohetes, pero si para empezar a mejorar de una forma significativa.
Charlotte Hornets
Un paso atrás
Su máximo anotador sigue sin firmar como agente libre después de haber sido arrestado bajo cargos de violencia doméstica. La situación de Miles Bridges deja en entredicho un verano sin grandes movimientos en la plantilla, pero sí con un cambio de entrenador. Steve Clifford vuelve al equipo y sustituye a James Borrego, y el único aliciente por ahora de todo el asunto sigue siendo el brillante juego de LaMelo Ball. Alcanzar una vez el play-in parece a día de hoy un sueño y no una realidad.
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido…