El Bàsquet Girona ha renacido. Los de Aíto García Reneses han dejado atrás su mala racha para sumar su segunda victoria consecutiva, la primera en Fontajau, tras apabullar al UCAM Murcia en un partido en que los catalanes han aprovechado el acierto exterior para dominar en el marcador y noquear a sus contrincantes.
El duelo ha contado con un inicio renqueante con ambos equipos con sendas imprecisiones. Los locales, aprovechando la ausencia del norteamericano, han despertado y han enchufado un parcial de 7-0 de la mano de Taylor y Colom que les ha permitido aventajarse. Los de Aíto se han gustado desde el perímetro, han tirado más de tres que de dos, para cerrar el primer cuarto con una clara ventaja (24-10).
Sito Alonso no ha esperado más y ante el drama de su equipo ha sacado al francotirador McFadden, que ha quedado constantemente incapacitado por la defensa catalana. Trice y Sakho han intentado recortar distancias y se han topado con Dusan Miletic al que hoy parecía haberle poseído Stephen Curry. Tres triples seguidos del serbio han obligado al técnico visitante a frenar la sangría. No ha servido de mucho. Una técnica y una personal de Diop han colocado un ventajoso (40-25) para los catalanes que han seguido a lo suyo sacando garra de la mano del jugador-presidente, Marc Gasol, con un espléndido 2+1 y se han ido al descanso con diecinueve puntos de margen positivo.
Davis y Trice han intentado reaccionar, pero la vieja guardia catalana -con un imperial Gasol y un inspirado Colom– han seguido a haciendo de las suyas. Ni el cuadro de “el Grito” de Edvard Munch podría asemejarse a las expresiones del cuerpo técnico de los murcianos, que a mediados del tercer cuarto perdían de 25 puntos (70-45) y se resignaban a ver el transcurso de la derrota. Los últimos diez minutos han sido intrascendentes. El UCAM ha intentado rebajar la barrera de los veinte puntos, pero la distancia era inasumible. Una victoria que les da un impulso moral a los de Aíto antes de visitar al todopoderoso Barça el próximo domingo en el Palau.