El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dio a conocer esta semana su Informe de Desarrollo Humano Municipal 2010-2020, Una década de transformaciones locales en México, que presenta una medición periódica del Índice de Desarrollo Humano (IDH) a nivel local en México.
Según el informe, el 51.9% de los municipios de México se encuentran en un nivel de desarrollo “medio y bajo” que es menor al 0.7 en una escala que va hasta el 1, a comparación del 63.4% que se midió en el 2015. Por lo que hubo una reducción de municipios en niveles bajo o medio del casi 12%.
El informe sostiene que mientras que para 2020 se avanzó en el Subíndice de Salud (SS) y el Subíndice de Educación (SE), hubo un retroceso de 0.06% del Subíndice de Ingresos (SI) respecto a 2010 y de 2.7% en comparación al 2015. El promedio de este índice en 2020 fue de 0.747.
Por medio de una década de análisis sobre las condiciones de desarrollo humano de municipios en México, el PNUD logra visibilizar no solo desigualdades y rezagos que existen a nivel local, pero también “analiza la relación entre la evolución del desarrollo humano y las capacidades con las que cuentan los gobiernos municipales para impulsar el desarrollo sostenible desde lo local”.
El Índice de Desarrollo Humano analiza tres dimensiones que son esenciales para el bienestar humano: educación, los ingresos disponibles y la salud; sin embargo, a nivel local en México, la salud se mide a través de la tasa de mortalidad infantil.
El PNUD argumenta en el informe que “si la medición del IDH en lo municipal es analizado en términos poblaciones, es decir, contabilizando el tamaño población de cada municipio, la mayoría de la población mexicana habita en municipios de desarrollo humano alto o muy alto, aunque cerca de una quinta parte de la población mexicana aún habita en municipios de desarrollo medio o bajo”.
Esto se debe en gran parte a que más de la mitad de los municipios tienen menos de 15 mil habitantes, que son en su gran mayoría los que tienen el desarrollo más bajo, mientras que en las ciudades se concentra más gente y es más fácil acceder a servicios de salud, educación y seguridad social.
En este sentido, los estados que tienen el desarrollo humano a nivel municipal más alto son Ciudad de México, Nuevo León y Aguascalientes, mientras que el más bajo es en Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Lo que señala el PNUD es que es “notorio” que las regiones con más alto desarrollo sean en el centro y norte del país, mientras que los de menor desarrollo se encuentren en ecosistemas montañosos o de selvas húmedas, tal como Chiapas.
Esto se debe a que hay una correlación entre el desarrollo y las condiciones “orográficas, climáticas y biodiversas”. Por lo tanto, el PNUD hace énfasis en la importancia de “contar con estrategias de desarrollo con un enfoque sostenible, y que no representen amenazas para el mantenimiento, preservación y cumplimiento de las funciones integrales de los ecosistemas nacionales”.
Finalmente, el informe del PNUD termina con dos reflexiones centrales. La primera es la importancia de pensar la política urbana desde una diferente perspectiva para evitar la desigualdad que hoy se ve entre los municipios rurales y urbanos.
Segundo, la importancia de la igualdad de género como parte esencial de las estrategias integrales de desarrollo en el país. Y tercero, la importancia de abrir espacios entre personas que viven una misma problemática para buscar soluciones comunes e integrales.
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