El gran partido de Will Clyburn (34 puntos y 38 de valoración) ha servido para que el CSKA de Moscú lograra una clara victoria en Estambul (68-85) y, lo que es más importante, poner el 3-0 en su serie de cuarto ente el Fenerbahce y sellar el billete del conjunto moscovita para la próxima Final Four de Colonia.
El Fenerbahce arranca fuerte… pero se le acaba el fuelle
El encuentro arrancó, como era de esperar (y más tras el 2-0 con el que venían de los primeros duelos en Moscú) con un claro dominio local, que firmaba de inicio un parcial de 12-0, gracias a las actuaciones de dos de sus estrellas, el francés Nando De Colo y un recuperado Jan Vesely.
Hasta 3 minutos le costó al CSKA anotar su primera canasta del partido, pero fue de lo más premonitoria: un triple de Will Clyburn, a la postre, el mejor hombre del partido.
Una vez abiertas las hostilidades, el partido se convirtió (algo raro con un equipo turco de por medio) en un ‘toma y daca’ desde más allá de la línea de 6.75: hasta cinco triples se anotaron de forma consecutiva.
Pero de este intercambio, el Fenerbahce se sentía cómodo y logró finalizar el primer cuarto con una cómoda ventaja en el marcador (24-17)
Primer conato de remontada del CSKA
El segundo cuarto arrancó con un conjunto ruso mucho más centrado que, gracias Voigtmann y, cómo no, Clyburn recortó distancias (24-21), pero lejos de venirse abajo, el Fenerbahce firmó un parcial de 9-2 para lograr otra vez una diferencia cómoda, con los ‘psicológicos’ 10 puntos a favor (33-23).
Pero a partir de ahí, el apagón local. O mejor dicho, al CSKA se le encendieron las luces, y de la mano de Clyburn (17 puntos) y el ex ACB, Iffe Lundberg, firmaron un parcial de 6-21 para irse a los vestuarios con ventaja de 39-44 al descanso.
Parcial de 0-14 de salida y Clyburn desatado
Pero cuando parecía que el Fenerbahce haría un último esfuerzo para volver a meterse en el partido y lograr un triunfo que le permitiera alargar la serie, se produjo la, quizás, jugada más decisiva del partido: a Jan Vesely le señalaron una polémica falta en ataque y, tras protestar, una técnica que acabó con el pívot checo eliminado por faltas personales. Y todo eso en el primer minuto de las segunda parte.
Y ahí, el CSKA olió sangre y quiso dejar las cosas claras. Y vaya si lo hizo: parcial de 0-14 de salida y un ya casi definitivo 39-58 en el marcador.
Con la dupla Clyburn-Lundberg a pleno rendimiento (16 puntos entre amos en el tercer cuarto), el Fenerbahce no supo dar respuesta al vendaval del conjunto moscovita. Y los números no engañan: 11-27 de parcial en el cuarto, para un 50-71 en el marcador y el partido sentenciado.
Un último cuarto de puro trámite
Con la ventaja de los de Dimitrios Itoudis estabilizada por encima de los 20 puntos (llegó a tener una máxima de 26 en con el 52-78), los últimos minutos de partido no tuvieron otro interés que ver como Clyburn completaba su mejor partido en la Euroliga, logrando topes en puntos y valoración, y ver como el Fenerbahce ‘maquillaba’ algo el marcador para dejarlo en el definitivo 68-85.
(+) Mira el resumen del Fenerbahce Beko – CSKA Moscú
Las bajas por Covid-19 (hasta 5 jugadores y el entrenador) pesaron demasiado en contra del conjunto turco, que en ningún momento pudo oponer resistencia ante un CSKA que ya partía como favorito antes de empezar la serie, aunque quizás nadie esperaba que firmara un 3-0 con tres victorias tan contundentes.
Ahora, con el billete para la Final Four ya en el bolsillo, esperará a ver cómo acaba la eliminatoria entre el Anadolu Efes y el Real Madrid para saber cuál será su rival en las semifinales de Colonia.
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