Rara es la estadística referente a goles en el Athletic en la que no aparezca la figura de Aritz Aduriz. Especialmente en la época moderna. El primer hat trick en la historia del nuevo San Mamés también lleva la firma del delantero. Todo un pionero. Lo consiguió frente al rival que hoy visita a los leones: el Granada. Fue un 28 de febrero de 2014, cuando el estadio ni siquiera estaba completado. Dos de sus dianas fueron en una Tribuna Sur que aún estaba en obras. Aduriz no podrá sumar ninguna muesca a su hoja de servicios en esta ocasión. Una lesión en la cadera le tiene fuera de circulación.
El triplete frente al Granada es uno de los seis que guarda en su colección como león. Y fue el primero de los cinco que se han producido en el nuevo San Mamés. Cuatro son de Aduriz y el restante es obra de Griezmann, en su etapa en el Atlético. El más recordado del 20 del Athletic fue el hat trick contra el Barcelona en agosto de 2015 con el que allanó el título de la Supercopa.
El atacante también se llevó el esférico a su casa en la victoria frente al Deportivo (4-1) en la campaña 2015-16. La última vez no se quedó satisfecho con un triplete en el mismo partido. Le hizo cinco goles al Genk (5-3) en una noche europea que ha pasado a la historia del actual recinto del conjunto zurigorri.
Pero la primera fue contra el Granada. Aduriz lideraba a un Athletic que caminaba con paso firme hacia la Champions. Un cuarto puesto que no se escaparía. El 20 llegó con hambre al choque frente a los nazaríes, puesto que la anterior jornada se la perdió debido a una sanción. Así que desató todo su arsenal con el primer rival que tuvo enfrente.
Tardó 7 minutos en inaugurar el electrónico. Iraola centró desde la derecha y Aduriz se suspendió en el aire en un salto eterno. Remate picado con sutileza y ajustado al poste. El guipuzcoano aumentó la renta en el 18’ con un espectacular derechazo lejano. Quizás uno de sus tantos más bellos como león. El cuero se coló por la mismísima escuadra.
Aduriz alcanzó el hat trick con un penalti que él mismo provocó y que le costó la roja directa a Mainz. Lo transformó con su temple habitual, con un lanzamiento raso y por el centro. Algo que no le sentó demasiado bien a Roberto, portero del Granada, quien fue a recriminarle algo. Gurpegi cerró la goleada con el definitivo 4-0 y el pichichi del Athletic fue relevado en la recta final, con ovación incluida, por Guillermo.
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