En esta época de despedidas y deseos, la Real quiere decir agur a 2019 con una nueva victoria que le permita cumplir su anhelo de seguir en puestos europeos. Los donostiarras esperan el regalo de los tres puntos porque se portaron bien ante el Barcelona hace ocho días (2-2), partido en el que merecieron ganar, y el jueves en Palencia, con la goleada de escándalo al Becerril (0-8), pero son conscientes de que deben ofrecer lo mejor como equipo por tercera vez esta semana para derrotar a un correoso Osasuna en un El Sadar (14 horas) que es como El Álamo.
Es un encuentro que tiene todos los alicientes, más allá de la relevancia de los puntos. Si gana, la Real cambiará de año en puestos europeos y podría hacerlo incluso en Champions según cómo se den los resultados, tras la derrota de ayer del Getafe . En caso de derrota, podría caer de las plazas europeas. El propio Jagoba
Arrasate califica a su exequipo como el más valiente de la categoría y el que con más recursos sabe salir de una presión, pero los txuri urdin sólo han sumado un triunfo en los últimos cinco partidos. La imagen y el espectáculo no alimentan.
El técnico de Osasuna, Jagoba
Arrasate, entrenó a la Real en la Champions y se estrena ante el equipo de sus amores. Su segundo, Bittor
Alkiza, es un exrealista de la cantera. Merino y Monreal juegan contra su exequipo en la Real más navarra que se recuerda, con otros dos futbolistas nacidos en el Viejo Reino como Remiro y Aihen. Hermanos antes del partido, nadie quiere ser primo en el césped, donde se desatará una batalla.
Así planteará el partido un Osasuna experto en asfixiar a sus oponentes en su campo con una presión a la que se entregan con espíritu espartano. En cómo pueda salir de ella la Real, en largo o asociándose, puede estar la clave del encuentro. Es complicadísimo ganar en El Sadar, como acredita el dato de que Osasuna sumaba 31 encuentros sin perder hasta que lo asaltó el Athletic el pasado 24 de noviembre. El rojiblanco es el único conjunto que ha ganado en ese feudo en los ocho partidos disputados hasta la fecha. Pero al cuadro rojillo tampoco se le caen los triunfos en su campo: tres en ocho citas ha conseguido.
La Real viene de dos empates ante Valladolid y Barcelona y las victorias le empiezan a urgir. Fuera es el tercer equipo más solvente de Primera, con 14 puntos en nueve partidos, igual que el Barcelona. Y tiene el aval de que suma tres victorias y tres empates en sus seis últimos duelos ante Osasuna, pero éste será otra historia.
Imanol recupera a Le
Normand tras su sanción y puede componer algo parecido a un ‘once’ de gala, sin los lesionados Sangalli, Aritz, Illarra y Zurutuza. Descansaron Remiro, Merino, Monreal, Zaldua, Guevara y Odegaard el jueves y fueron suplentes Isak, Portu y Oyarzabal. Hay dos dudas en la alineación: Le
Normand, que jugó 90 minutos en Palencia, Zubeldia, que disputó 67 minutos, y Llorente pugnan por las dos plazas del eje de la zaga. E Isak y Willian
José tienen similares opciones de ser el ‘9’, ya que los dos se emplearon durante medio tiempo en La Balastera.
Imanol se los lleva a todos
Para jugar al despiste o para mantener la armonía hasta última hora, Imanol se llevó anoche a Iruñea a sus 21 jugadores disponibles, incluidos Zubiaurre y Pardo, que hasta ahora no han entrado en ninguna lista. Hoy descartará a tres.
Jagoba, por su parte, dispone de sus mejores armas para afrontar el partido. Tiene siete lesionados, pero podrá poner en liza a los Chimy, Rubén
García, Torres, Oier y compañía, los que están yendo como un auténtico avión en esta temporada de retorno a Primera. Tienen 23 puntos, por lo que un triunfo les coloca a dos de la Real con sólo un partido de la primera vuelta por disputarse. Muy significativo.
Urgen los puntos para la Real. A ganar hemos de ir a Pamplona.
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