Tras seis años como titular indiscutible en la banda izquierda del Santiago Bernabéu, Marcelo Vieira ha visto comprometido su estatus después de la explosión de Ferland Mendy. El lateral francés llegó en verano procedente del Olympique de Lyon a cambio de 45 millones de euros como una apuesta personal de Zinedine Zidane y en apenas unos meses se ha hecho dueño del carril izquierdo del Madrid. El técnico galo prefirió prescindir de Sergio Reguilón (cedido en el Sevilla) para despejar el camino a su compatriota.
Tras un arranque de curso dubitativo, Mendy se ha convertido en una pieza imprescindible para entender el excelente rendimiento defensivo del Real Madrid, el equipo menos goleado de las cinco grandes ligas con un registro sin precedentes: nunca hasta ahora había encajado tan pocos goles (13) a estas alturas de la campaña (22 jornadas).
Contra el Atlético de Madrid, Mendy volvió a sellar su zona y protagonizó varias coberturas en el primer tiempo que le evitaron un par de sustos más severos a Courtois. En la segunda parte tomó más responsablidad en el ataque y firmó su primera asistencia de blanco gracias a un buen centro a Benzema llegando en carrera. En el derbi, además, fue el jugador del Madrid que más veces regateó con éxito (4).
Esta temporada, Mendy acumula 18 partidos jugados, 13 de ellos de Liga en 22 jornadas. En total, suma 1.422 minutos disputado. Marcelo, en cambio, ha ido perdiendo protagonismo con el paso de las semanas, engullido por la fiabilidad de su compañero. El lateral zurdo suma 14 partidos jugados con un total de 1.077 minutos y sus titularidades en los dos partidos de la Copa del Rey ante el Unionistas y el Zaragoza evidencian que la importancia de su rol ha menguado considerablemente.
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