Duncan adelanta a la historia: Hammon y las mujeres todavía esperan su oportunidad

Los San Antonio Spurs saltaron a la cancha en la ajustada victoria por 103-104 sobre los Charlotte Hornets con una novedad notoria. En el banquillo de los texanos no se sentaba un tipo mayor de pelo blanco y con cara de pocas amigos, el legendario Gregg Popovich, sino un hombre con rastas que bien podría haber pasado por actual jugador de la plantilla, el también legendario Tim Duncan. La historia, claro, hubiera sido que la persona que ocupará el foco en los banquillos fuera una mujer, la entrenadora asistente de Popovich durante los últimos seis años, Becky Hammon. Pero eso no ocurrió, y nadie sabe muy bien por qué.

Que Tim Duncan puede liderar a un grupo de jugadores es evidente, ya lo hacía como estandarte de una de las franquicias más laureadas de la historia hace pocos años como jugador, y su papel como asistente de Pop constata que tiene nivel de sobra para la dirección. El tema es que Hammon también lo tiene, y de hecho su trayectoria como preparadora en la NBA es seis veces superior a la que tiene Duncan, que asumió el cargo de ayudante técnico el pasado verano.

En el fondo, la gran pregunta es: ¿por qué no hacer historia? Los Spurs y la NBA tenían ante sí la oportunidad de promocionar a la primera entrenadora de la historia de las grandes ligas del deporte profesional, en cualquier deporte y categoría. No era una minucia, vaya. Igual que el pasado mes de noviembre, cuando Popovich fue expulsado de un partido contra Washington, muchos aficionados y periodistas imaginaron que la responsabilidad de dirigir el encuentro recaería en la primera ayudante del veterano entrenador, pero no fue así.

A Popovich no le importa

“No estoy aquí para hacer historia”, cortó en seco Popovich cuando los periodistas le preguntaron sobre la oportunidad que representaría darle a Becky Hammon el banquillo. En esa ocasión, los Spurs comentaron que sin Pops, consideraban que el cargo de entrenador recaía más bien en un ente colectivo, el formado por todos sus entrenadores asistentes. Duncan explicó ante la prensa este lunes que lo mismo ocurrió en Charlotte. “Tenemos a Becky Hammon, Will Hardy y Mitch Johnson. Mitch preparó el encuentro, Becky y Will tomaban las decisiones y yo era el que estaba ahí de pie gritando a la gente cosas sinsentido”, compartió el cinco veces campeón de la NBA. “Entrenamos por comité, y podría haber estado cualquiera de nosotros en primera línea, hubiéramos obtenido el mismo resultado”.

Como apunta Duncan, los Spurs podrían haber situado a cualquier persona al mando, pero optaron por el exjugador en vez de la exjugadora. Contra los Wizards dijeron que Tim lideró el barco por haber hecho el scouting previo del rival, un hecho que se repitió este lunes contra los Hornets. Esa ha sido la única justificación con sentido de la franquicia hasta ahora. Y es válida, hay que decirlo.

Pionera de la mujer en la NBA

A estas alturas, Hammon podría ser la entrenadora de uno de los equipos punteros de la liga. En 2018 fue entrevistada para el puesto con los Milwaukee Bucks, que finalmente obtuvo Mike Budenholzer con muy buenos resultados para la franquicia del actual MVP de la liga, Giannis Antetokoumpo. En los últimos meses también se ha especulado con una posible llegada de Hammon al mercado más grande de la NBA, el de los New York Knicks. “La NBA pierde una oportunidad al no aprovechar el talento de las mujeres”, decía Hammon en una entrevista hace un par de años. De momento, mucho ruido y pocas nueces para una preparadora que ha sido pionera en la liga. En la NBA actual hay un total de seis mujeres en puestos de responsabilidad en los banquillos: Jenny Boucek (Dallas Mavericks), Natalie Nakase (Los Angeles Clippers), Kristi Toliver (Washington Wizards), Karen Stack Umlauf (Chicago Bulls), Lindsey Harding (Philadelphia 76ers) y la misma Hammon.

A pesar de no debutar como entrenadora principal todavía, la 6 veces All Star de la WNBA, considerada en 2011 como una de las mejores 15 jugadoras de la historia de la liga, no ha dejado de recibir elogios de sus colegas de profesión. “He jugado bajo las órdenes de dos de las mentes más agudas de la historia del deporte, Phil Jackson y Gregg Popovich. Y te aseguro que Becky Hammon puede entrenar”, escribía Pau Gasol en una columna en The Players Tribune. “No estoy diciendo que puede entrenar bastante bien. No estoy diciendo que pueda hacerlo suficientemente bien. No estoy diciendo que tenga casi el mismo nivel que los entrenadores NBA. Estoy diciendo lo siguiente: Becky Hammon puede entrenar baloncesto NBA. Punto”.

La cantera de los Spurs

A pesar de dejar pasar esta oportunidad, Popovich no es precisamente un enemigo en la lucha por la igualdad. Si Hammon está donde está es porque el mismo Pop confío en ella para cubrir el espacio dejado por James Borrego, actual entrenador de los Hornets, cuando este decidió dar el salto de asistente a entrenador. De hecho, lo más positivo para la entrenadora es que está en una auténtica mina de oro de preparadores NBA. Borrego salió de la cantera de Popovich, y los nombres de Ettore Messina e Ime Udoka –exayudantes en San Antonio– sonaron en el pasado para varios equipos de primer nivel. El propio Budenholzer, líder con los Bucks, o Tom Thibodeau son otros entrenadores con experiencia previa en el banco texano antes de dar el gran salto.

Becky Hammon, con los Spurs durante un partido de pretemporada hace un par de años
Becky Hammon, con los Spurs durante un partido de pretemporada hace un par de años

“Ella sabe de lo suyo y confía en sí misma. El tema de ser él o ella no tiene nada que ver aquí. Ella es entrenadora, y luego da la casualidad de que es una mujer. Y eso es todo” comentaba Popovich cuando la ascendió al cargo de ayudante principal del conjunto de El Alamo. “Si hubiera sido un ‘él’ que hubiera estado más cualificado, lo hubiera contratado también. Solo espero que otras personas sigan el ejemplo y se fijen en las capacidades, en si se está capacitado o no”.

Según el entrenador, Becky es un caso especial, pero no el único que existe hoy en día: “Hay otras mujeres preparadas y espero que la gente se dé cuenta”. La NBA, siempre muy avanzada en temas de inclusión y género, también se muestra confiada con la llegada de las mujeres a los principales puestos de responsabilidad de la liga. “Estamos cerca, no podemos predecir el futuro pero creo que estamos a punto”, comentaba Liliahn Majeed, vicepresidente de diversidad e inclusión de la NBA a Reuters. “La NBA y el mundo del deporte están preparados para ver a una mujer de General Manager o entrenadora principal”.

De momento, la historia deberá esperar, aunque es cierto que quizás los Spurs saben bien lo que hacen y no quieren escribirla antes de tiempo. Gregg Popovich terminará contrato en 2021, y es muy probable que el puesto de entrenador de San Antonio quede vacante. ¿Es ese el momento que esperan Hammon y la franquicia? El tiempo dirá.


Source link