Un juez federal de los Estados Unidos ha rechazado la demanda interpuesta en marzo de 2019 por las jugadoras de la selección femenina de fútbol de aquel país, por la que reclamaban igualar sus ingresos a los de los futbolistas masculinos. La decisión supone un duro golpe a las actuales campeonas del mundo, que ya han anunciado su intención de apelar la sentencia. Las internacionales denunciaban discriminación salarial.
El magistrado Gary Klausner, de los juzgados de California, asegura en el fallo que las futbolistas desestimaron en su momento una oferta de la Federación para igualar estos ingresos, lo que anula el motivo de la denuncia. Las internacionales reclamaban un total de 66 millones de dólares, con carácter retroactivo, para igualarse con los integrantes de la selección masculina.
El juez asegura que las jugadoras rechazaron una oferta para cobrar igual que los integrantes de la selección masculina
“La historia de las negociaciones demuestra que la selección femenina rechazó una oferta para ser remunerada bajo la misma estructura de pago por partido que la masculina”, redactó Klausner en la sentencia. “Por ello, las demandantes no pueden ahora considerar retroactivamente sus condiciones económicas peores que las del equipo masculino”, argumentó.
Según aseguró la Federación ante el juez, entre 2015 y 2019 la selección femenina recibió incluso más dinero que la masculina: 24 millones ellas, a razón de 220.747 dólares por partido, y 18 millones ellos, a 212.639 dólares por choque.
La Federación asegura que entre 2015 y 2019 el combinado femenino recibió 24 millones de dólares por 18 el masculino
La Federación también ha esgrimido la diferencia de los premios que otorga la FIFA a los campeones de los Mundiales masculinos o femeninos para rechazar la retroactividad de la reclamación. Según este organismo, la FIFA premió a Alemania con 35 millones en 2014 y a Francia con 38 en 2018 por ganar el Mundial masculino mientras que EE.UU., por imponerse en los últimos dos Mundiales femeninos, alcanzó un montante total de 6 millones.
El proceso se vio alterado por frases sexistas, como cuando la Federación argumentó que los chicos requieren “un nivel más alto de destreza”
Este proceso se ha visto salpicado de incidentes de tipo sexista. Como, por ejemplo, cuando la Federación defendió que el trabajo de un jugador requiere “un nivel más alto de destreza”
que el de una jugadora y que las condiciones que afronta el equipo masculino cuando juega en canchas de México o Centroamérica no se podían comparar a ninguna de las que vive el equipo femenino.
Estos argumentos fueron posteriormente retirados de la argumentación por la Federación pero acabaron provocando el relevo al frente de este organismo.
Las jugadoras ya han hecho pública su intención de recurrir la sentencia al tiempo que desde la Federación se hacían oír voces reclamando trabajar conjuntamente en beneficio exclusivo del fútbol femenino estadounidense.
Source link