BUENOS AIRES.— Quedó prohibido besar la pelota para tener buena suerte en el fútbol de Sudamérica. Tampoco se podrá intercambiar camisetas, y no se tolerará el escupir o soplarse la nariz.
Para cuando pueda reanudar la Copa Libertadores, su máximo torneos de clubes, la CONMEBOL pondrá en vigor una serie de controles y restricciones por la pandemia del coronavirus.
La entidad rectora del fútbol sudamericano modificó su reglamento de competencia para incorporar protocolos sanitarios, incluyendo que los jugadores tendrán que someterse para detectar el COVID-19,
El protocolo fue divulgado la noche del miércoles dentro de una circular difundida por la CONMEBOL. También aplicará para la Copa Sudamericano, la otra competición de clubes que se paralizó por la pandemia.
Se dio a conocer tras una reunión del consejo de la entidad sudamericana, en la cual no hubo definiciones sobre la reanudación de los torneos continentales que se interrumpieron a mediados de marzo.
Una fuente al tanto de las conversaciones dijo a The Associated Press que la dirigencia sudamericana se ha fijado “septiembre” como horizonte para reanudar las competencias de clubes — la Copa Libertadores y Sudamericana — y para dar comienzo a las eliminatorias sudamericanas rumbo a Qatar 2020.
La fuente pidió reserva de identidad por no estar autorizada para hablar del tema. En la circular a sus asociaciones miembros, la CONMEBOL informó que creará un Registro Médico de Control, en el que se inscribirán los jugadores, cuerpo técnico y otros participantes en los encuentros.
“Los integrantes del Registro Médico de Control deberán someterse obligatoriamente a Test de COVID-19 de acuerdo al establecido en el Protocolo Médico de CONMEBOL”, indica el documento suscrito por Federico Nantes, director de competiciones de clubes. “Asimismo, la CONMEBOL podrá ordenar Test de COVID-19 adicionales previo a los partidos o durante los periodos (de) entrenamientos”.
Una vez en los cotejos, estará prohibido que los jugadores y los demás participantes escupan o expulsen los fluidos nasales en la cancha o en el banquillo. Tampoco podrán besar el balón durante el partido o después de éste.
Todas las personas involucradas en el encuentro tendrán que someterse a controles de temperatura corporal. Estará prohibido compartir botellas para beber líquidos, intercambiar camisetas u otros objetos personales, así como obsequiarse banderines.
Y todos los jugadores e integrantes del cuerpo técnico que estén en la banca o en una conferencia de prensa —si es que éstas se permiten— deberán usar mascarilla. Las mascarillas deberán ser también utilizadas en caso de que se realicen ruedas de prensa tras los partidos, indicó el ente, que fijó sanciones y multas de hasta $200 por incumplir esa normativa.
Tomando en cuenta los cambios que podrían experimentar los planteles de los clubes entre el momento en que se suspendieron los torneos y la fecha de la reanudación, la CONMEBOL autorizará hasta cinco sustituciones en las listas originales.
Ante el avance del coronavirus en Sudamérica, la CONMEBOL suspendió el 12 de marzo la Copa Libertadores tras cumplirse apenas la segunda fecha de la etapa de grupos. La Sudamericana ya había completado la primera fase. Casi de inmediato, las ligas de la región también se interrumpieron.
Tampoco se pudieron disputar las primeras dos fechas de las eliminatorias mundialistas. La Copa América, que debía realizarse en Colombia y Argentina en junio, se pospuso un año.
La CONMEBOL también confirmó que giró otros 14 millones de dólares para repartir entre sus diez asociaciones y que beneficiará a más de 400 clubes de la región.
Este monto corresponde a fondos del programa Evolución destinado a proyectos para el desarrollo del deporte, en especial en categoría juveniles. Pero la CONMEBOL decidió repartirlo para mitigar las consecuencias económicas de la interrupción del calendario deportivo.
La entidad sudamericana lleva distribuidos 79 millones de dólares para asistir a sus miembros en medio de la pandemia de coronavirus.