Durante el confinamiento, los futbolistas han echado de menos ejercitarse sobre el verde y el contacto con los compañeros, al margen de la competición. Han tratado de mantener la forma de la mejor manera posible en casa, con ejercicios de fuerza, bicicletas estáticas, cintas de correr… Pero les faltaba el balón. Y, en el caso concreto de los porteros, su trabajo más específico bajo palos. Nadie se los imaginaba haciendo palomitas en el salón… Cuestiones que comenta el titular del Athletic Unai Simón, las circunstancias que le está tocando vivir en la temporada de su lanzamiento, marcada como para todos por el coronavirus.
Unai Simón celebra los pasos que van dando, superando las fases de trabajo en Lezama. Actualmente, se entrenan ya divididos en dos grupos. Pueden ser de hasta 14 jugadores. “Poco a poco, vamos recuperando la normalidad, viendo que hace un par de semanas estábamos entrenando individualmente. Tenías esa alegría de tocar la pelota, pero también querías estar con los compañeros. Se va viendo que, poco a poco, los vamos consiguiendo, sumando número de jugadores y compartiendo con más compañeros la pelota”, explica en declaraciones facilitadas por el club.
El guardameta rojiblanco, sobre su particular plan de ejercicios dada su posición sobre el tablero, agradece la mayor libertad de acción. Sentirse porteros. Resalta que “lo que hacíamos en casa era más físico, correr, bicicleta, fondo y mantener la forma física. Y en la primera semana individual, volver a tirarte al suelo, volar, despegar y parar balones se echaba de menos. Parecíamos torpe, pero poco a poco vamos cogiendo ritmo y volviendo a la normalidad”.
En cuanto a la temporada que llevaba, titular con 2.160 minutos en 24 partidos -hay que recordar que también pasó unas paperas-, siendo de los menos goleados, el de Murgia apunta que “estaba muy contento con la dinámica que estaba siguiendo, iba relacionada con la del equipo. Estábamos en la final de Copa, alcanzando muy buenos resultados. Luego surgieron estas complicaciones que vivimos, pero estamos trabando para poder recuperar la forma que teníamos, o mejor, y volver a la dinámica con la que acabamos”.
Los cancerberos suelen guardar una estrecha conexión con el público, con los fondos en los que se ubican sus porterías… En la vuelta a la Liga ahí tendrá un vacío. Rara sensación. “Para los porteros y para todo el mundo. Nosotros igual sí tenemos esa relación más cercana con la grada, pero se va a notar mucho. Sabemos cómo es de importante la afición del Athletic en todos los partidos de San Mamés. Se hará extraño y seguramente costará un poco más, pero es adaptarse. El que antes lo hace es el que consigue los objetivos. De eso se trata, de adaptarse”, manifiesta Unai Simón.
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