El
Atlético de Madrid
anunció recientemente el regreso al club del canterano Caio
Henrique. El ahora lateral izquierdo colchonero deja Gremio, club con el que se había cerrado su cesión el pasado mercado invernal. Al jugador, que terminó su formación en el equipo colchonero, donde llegó siendo juvenil, se le puede considerar otro canterano más que tendrá ele quipo rojiblanco en esta nueva etapa.
Con su recuperación, el Atlético de Madrid quiere repetir una fórmula de éxito que ha sido una constante en las últimas décadas. A nadie se le escapa que, para los canteranos, siempre fue complicado triunfar en el primer equipo. La exigencia que tiene el club colchonero supusieron una barrera gigante para muchos chicos que soñaban con triunfar en el equipo de su vida.
No todos tuvieron la entereza y perseverancia de Koke, por ejemplo. Para otros, el traje de hijo pródigo se tuvo que tejer lejos de casa. El brasileño puede ser el enésimo ejemplo de una fórmula de éxito que el Atlético ha repetido en las últimas décadas.
Y es que los responsables del Atlético siempre han estado atentos a los canteranos cuando abandonaron el club por una razón u otra, de forma momentánea o definitiva. Siempre prestos a recuperar a cualquier jugador que haya logrado destacar lejos de casa, cuando no pudo hacerlo de rojiblanco.
Sin ir más lejos, el equipo lo hizo el curso pasado con Rodrigo
Hernández, que se había criado en la cantera del Atlético antes de irse en juveniles al Villarreal. El equipo rojiblanco anduvo listo para firmarle aunque una temporada después abandonase el club por 70 millones de euros para irse al Manchester Cit
y, a las órdenes de Pep
Guardiola.
Antes de su partida, el madrileño seguía los pasos de compañeros como Mario Suárez o Gabi
Hernández, ninguno de ellos logró triunfar en primera instancia en el Atlético para posteriormente volver y ser importantes a las órdenes de Simeone.
No son los únicos casos claro, ya decimos que con más o menos fortuna, en los últimos 20 años, el Atlético ha echado mano de canteranos en esa posición, casos de Zahínos, Diego Rivas o Cubillo, que no lograron triunfar en el primer equipo pero que sí que destacaban en otros destinos como el Getafe. Aquellos tres casos, ya lejanos, no cuajaron pero estas últimas experiencias sí que han triunfado.
Recordemos que el madrileño se marchó de la cantera del Atlético en juveniles, instancias anteriores a la de los casos que nos referimos. En lo referente a Mario
Suárez, el equipo colchonero le recuperó en la 10/11 por 1,8 millones de euros procedente del Real Mallorca. El mediocampista ya se había desvinculado del equipo rojiblanco pero pudo volver y triunfar, especialmente en la etapa de Simeone. Se marchó del club rojiblanco en la 15/16 en un traspaso por el que el equipo colchonero cobró 15 millones de euros a la Fiorentina. Una Liga, una Copa del Rey, una Europa League, una Supercopa de España y dos de Europa figuran en el palmarés de Mario
Suárez con el Atlético, club que dejó 16 años después de llegar, con 28. Con casi 200 partidos como colchonero y seis títulos.
Gabi
Fernández llegó al club madrileño un año después al de Mario, en la 11/12, procedente del Real Zaragoza, club al que abonó tres millones de euros. Fue pieza clave con Simeone, el capitán, un pilar en los últimos éxitos del equipo rojiblanco. Una Liga, una Copa del Rey, una Europa League, una Supercopa de España y otra de Europa figuran en su palmarés. Su futuro está en el cuerpo técnico.
Pero la fórmula ganadora de recuperar jugadores no sólo tiene que ver con estos casos, Saúl
Ñíguez estuvo una temporada cedido en el Rayo
Vallecano y volvió para convertirse en el jugador que ahora es, uno de los pilares del Atlético, uno de los futbolistas más utilizados por Simeone y uno de los centrocampistas más valiosos del mundo. Caso similar al de Thomas
Partey, que tras sendas cesiones en Mallorca y Almería, fue recuperado por el equipo rojiblanco. Con mucho trabajo e insistencia se ha convertido también en uno de los ejes de este equipo del Cholo.
Y más reciente, si cabe, el caso de Álvaro Morata. El madrileño fue canterano del Atlético hasta juveniles, pero se marchó al Getafe y luego al Real
Madrid. Triunfó en la Juventus, volvió al cuadro blanco… se marchó al Chelsea, y el equipo rojiblanco le volvió a fichar para que volviese a casa, de donde nunca debió haberse ido.
También hay otros casos hay como el de Fernando Torres, que regresó tras triunfar en la Premier;o más pretéritos en el tiempo como los de Antonio
López, que se hizo un nombre en Osasuna para convertirse en otro jugador clave durante su segunda etapa en el equipo colchonero.
EL TRAYECTO DE CAIO HENRIQUE
El mediocampista brasileño, que en la temporada 16/17 debutase con el primer equipo rojiblanco a las órdenes de Simeone, no tuvo continuidad en la siguiente, ni en el filial colchonero ni con los mayores; con lo que finalmente se optó por salir del club colchonero.
El prometedor jugador realizó la pretemporada a las órdenes de Simeone en 2016, y disputó varios partidos de preparación en aquel curso. Debutó como profesional con Atlético de Madrid el 30 de noviembre de 2016, fue titular en los 1/16 de la Copa del Re
y, su rival fue Guijuelo, al que el cuadro colchonero venció 0-6.
Un protagonismo que poco a poco fue menguando hasta que en abril de 2018, el jugador regresó a Brasil para protagonizar varias cesiones. La primera fue en Paraná, luego en Fluminense y ahora en Gremio. Hasta la fecha casi un centenar de partidos en la elite en Brasil para avalar su vuelta.
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