Estados Unidos es, por lejos, el primer país del mundo con más infectados y muertos por la pandemia de coronavirus, un triste récord que sostiene hace semanas. Y en tanto los estados norteamericanos avanzan en la reapertura económica y relajan las restricciones de las cuarentenas, el principal responsable científico en la lucha contra el Covid-19, Anthony Fauci, advirtió que el aumento de contagios en ese país es “inquietante”.
Y no lo dijo como al pasar, en una conversación informal, sino que directamente lo declaró en una audiencia en la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Hasta hoy, el país consigna 2.425.855 infectados y 123.520 muertos por el Covid-19.
Fauci fue claro para comunicar el estado actual del coronavirus en Estados Unidos: alertó que sin la capacidad de identificar completamente los contagios, aislar a los afectados y rastrear a sus contactos, la situación empeorará. Mientras que el presidente Donald Trump viene insistiendo con su latiguillo de que EE.UU. registra más infectados porque hace más pruebas a la población.
Mientras Fauci daba ayer su testimonio en el Congreso, la CNN reportaba que 25 estados habían registrado sus cifras más altas de casos adicionales de Covid-19 en comparación con las confirmadas una semana antes, y destacaba a Arizona, California, Florida, Michigan, Misuri, Montana, Oklahoma, Oregón, Texas, Washington o Wyoming.
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“Ahora mismo, las dos próximas semanas van a ser críticas en nuestra capacidad de abordar los resurgimientos que estamos viendo en Florida, Texas, Arizona y otros estados”, dijo Fauci sobre los contagios.
“Y vamos a acabar de regreso a donde estábamos”, presagió el epidemiólogo al explicar que si Estados Unidos no logra controlar la pandemia para otoño boreal, “esencialmente estaremos persiguiendo un incendio forestal”. Destacó que es clave tener un control completo del virus en lugar de solamente mitigarlo, que es lo que las autoridades sanitarias estadounidenses hacen actualmente.
Mientras que la Universidad Johns Hopkins confirmó hoy que en las últimas 24 horas se registraron 34.700 nuevos contagios en Estados Unidos, la cifra más alta en un solo día desde que comenzó el brote -salvo el 9 de abril, con 34.800 casos-.
Obama culpa a Trump de la grieta
En tanto, el expresidente Barack Obama acusó a la administración de Trump de “promover activamente la división” en el país norteamericano y en cuanto a su actuación ante la pandemia, dijo que “a diferencia de nuestro actual presidente, (los demócratas) reconocen que tenemos una crisis de salud pública“.
Obama lo dijo ayer en un acto para recaudar fondos para la campaña de su exvicepresidente Joe Biden, que presumiblemente será el candidato del Partido Demócrata a la Casa Blanca para las elecciones del próximo 3 de noviembre. La presencia de Obama fue decisiva: lograron recaudar más de u$s 7 millones, que hasta ahora fue el mayor importe en un solo evento para para la candidatura de Biden. “Tenemos esta oportunidad única de traducir una creciente conciencia de la injusticia en la sociedad en una legislación real y un cambio institucional y esos momentos no llegan con demasiada frecuencia”, urgió Obama.
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