”A lo largo de estas semanas hemos hecho todo lo necesario para ganar un título”, dijo Thomas Tuchel, el técnico alemán del PSG, dignísimo en la derrota apoyado en las muletas que le ayudan a sortear la fractura de un metatarso. “En el fútbol debes aceptar que en los partidos la suerte puede jugar un gran papel. Tuvimos nuestras ocasiones y no las marcamos”.Ahí estuvo el partido. Lo señaló Tuchel: en las ocasiones perdidas por los jugadores a los que se supone más condiciones desequilibrantes, con Kylian Mbappé a la cabeza. Más explícito fue Ander Herrera, que lo vio en primera línea.“Pienso que en una final tan importante contra un equipo tan bueno si no marcas lo pagas”, dijo el mediocampista español en Movistar. “En el primer tiempo hemos tenido tres ocasiones muy claras. Una de Ney, otra de Di María, y otra de Kylian, en la que yo tuve la opción de rematar pero pensé que él estaba en mejor posición. Hemos peleado y nos han creado pocas ocasiones uno de los equipos que más ocasiones crea del mundo”.El PSG se defendió bien. Nada nuevo en el equipo que menos goles encajó en este curso de la Champions: un total de seis. El plan funcionó hasta que se desbarató en el área rival. “Ellos han tenido más posesión pero es muy difícil pelearle la posesión a equipos con tanta calidad”, añadió Herrera. “Nuestra fortaleza era recuperar para salir a la contra. Creo que lo hemos hecho. Hemos hecho todo lo posible para ganar el partido pero no ha podido ser. Ellos han sido más eficaces. Han hecho su gol. Pero incluso a partir del gol hemos tenido ocasiones como la de Chupo, que creo que si la toca es gol. Para nuestros aficionados solo podemos decir que hemos creado algo que no se había visto antes, que es este grupo de jugadores”.“Hemos dado un paso adelante como grupo”, insistió Herrera. “Hemos demostrado que sabemos estar juntos. Creo que los esfuerzos que han hecho Neymar, Di María o Kylian, jugadores de talla mundial, demuestra lo que somos. Y luego estamos los jugadores como yo, que lo que hacemos es intentar facilitarles la vida a ellos. Podemos estar tremendamente orgullosos de como nos hemos comportado cada uno de nosotros, sin egoísmos. El fútbol es algo colectivo. La única forma de tener éxito es así. Neymar se ha matado por el equipo”.
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