Final de semana teñido de luto para don Felipe y doña Letizia. En un comienzo de curso más que extraño tras las atípicas vacaciones estivales, los Reyes se han desplazado hasta el madrileño tanatorio de Tres Cantos para dar el último adiós al marido de Xandra Falcó, Jaime Carvajal, fallecido de forma inesperada a los 56 años el pasado miércoles.
En torno a las 12:00 de la mañana y en un coche conducido por el propio don Felipe, los Reyes llegaban al tanatorio vestidos de riguroso luto y con mascarillas, tal como marca la normativa actual. A las puertas les esperaban varios miembros de la familia, entre ellos, Manuel Falcó, a los que, dada la situación, no han podido demostrar ningún tipo de gesto de cariño más allá de miradas de apoyo.
Desde hace varias décadas, los Carvajal guardan una especial relación con la Familia Real. El padre de Jaime Carvajal fue uno de los compañeros de don Juan Carlos durante su período escolar en Las Jarillas, su primer colegio en España, junto a otras destacas figuras como los marqueses de Cubas y Griñón, quien falleció el pasado 20 de marzo a causa del coronavirus.
Por su parte, el rey Felipe fue uno de los testigos de la boda de Jaime Carvajal y Xandra Falcó en 1988, a la que también acudió la infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarin. A esto hay que añadir que ha hermana de Jaime, Victoria, periodista de profesión, mantuvo un romance de juventud con don Felipe.
La muerte inesperada de Jaime Carvajal Hoyos ha sido una de las noticias más impactantes del final del verano. El matrimonio acababa de llegar a Madrid tras pasar unos días de descanso en Palma de Mallorca junto a sus tres hijas, después de enfrentarse el pasado mes de marzo a la pérdida del padre de Xandra, Carlos Falcó.
Aunque hoy ha tenido lugar el entierro, está previsto que más adelante se celebre un funeral para despedir al que fuera yerno de Carlos Falcó. Sin duda, un año difícil para la marquesa de Mirabel, que ha perdido en cuestión de meses a los dos hombres más importantes de su vida.