Lo de ayer en Lezama ya se pareció más a nivel de alineación a lo del próximo viernes en Granada, salvo cambio de última hora no descartable dado que la Federación Española insiste en que ni ese día de la semana ni el lunes puede haber partidos. Garitano puso en liza ante el Eibar una alineación mucho más reconocible. No la titular fija, pero sí con gran parte de las piezas que disputarán un encuentro oficial sí y otro también.
Lo de Ezkieta bajo palos responde a la presencia de Unai Simón con la selección de Luis Enrique. En los de los laterales ya hay más dudas. Parece evidente que la titularidad de Balenziaga ante el Eibar responde más que nada a los problemas de pubis de un Yuri que acaba de reincorporarse al trabajo en grupo. La de De Marcos, en la otra banda, causa cierta sorpresa, puesto que suele ser Capa el que ejerce en dicha demarcación. El gasteiztarra, que se perdió casi toda la temporada por una lesión de tobillo, gana terreno.
La otra novedad destacable en el Athletic del centro del campo hacia delante resulta un tanto irrelevante a tenor de lo presenciado durante lo que va de pretemporada. Morcillo volvió a dejar claro ante los armeros que su presencia en el interior zurdo no es fruto de la casualidad. El primer fichaje en clave rojiblanca para esta nueva campaña procede de Lezama. El delantero de Amorebieta se ha ganado un sitio en la primera plantilla.
La segunda mitad sirvió para ver en acciones a nuevos rojiblancos. Esta vez, como el día anterior en Oviedo, no hubo rotación total. Mendilibar siguió la misma táctica en el Eibar. Tres cambios y punto.
Sancet fue la apuesta inicial de Garitano a la hora de tirar de banquillo. Unai López, otro clásico tratándose de las sustituciones del deriotarra, dejó su lugar al navarro al ser el primer león relevado. Ewan Urain entró por Williams a falta de 20 minutos y Sillero por Muniain en el 80. De Marcos pasó así a ejercer de interior diestro con el capitán del Bilbao Athletic por detrás.
Otra de las características comunes de este amistoso de los rojiblancos frente a los armeros fue su tendencia a meterse atrás con el marcador a favor. Tras controlar el primer tiempo de cabo a rabo e irse al descanso con 2-0 de ventaja, los leones recularon en la segunda mitad. Mendilibar, también recurriendo a los tres cambios permitidos, persistió en su propuesta y poco a poco el balón fue dejando de rondar las inmediaciones de la portería de Yoel para acercarse a la de Ezkieta.
La aportación de Sancet volvió a resultar escasa por no decir nula, circunstancia que aprovecharon los armeros para mandar en la zona ancha y firmar el empate in extremis con dos goles precedidos de otros tantos rebotas en las piernas de Iñigo Martínez y Ewan. Todo, por tanto, sigue igual en el Athletic a excepción, eso sí, de la ilusionante irrupción de Morcillo.
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