La llegada de David
Silva a la Real es una bendición para compañeros e Imanol
Alguacil. A la innegable calidad del canario y a su inmaculado currículum hay que añadir otra de las cualidades que debe tener un deportista de élite: el compromiso y la profesionalidad. En éstos dos aspectos, el mago de Arguineguín también lo borda.
Imanol
Alguacil dio ayer a sus pupilos la única jornada de descanso tras el entrenamiento recuperatorio del lunes, donde sólo participaron los futbolistas que fueron suplentes o no jugaron ante el Valladolid. Mientras la mayoría de los jugadores aprovecharon su día libre para el ocio o simplemente para descansar en sus domicilios, David
Silva cumplió con su deber y acudió a Zubieta con la firme intención de ponerse a tono. Según ha podido saber MD, el canario realizó un entrenamiento individual en Zubieta con la mirada puesta en el domingo, partido en el que tiene papeletas para ponerse por primera vez la txuri urdin.
Las vacaciones del canario comenzaron hace exactamente un mes, cuando el Manchester City cayó eliminado de la Champions League de la mano del Olympique de Lyon el 15 de agosto. El centrocampista viajó directamente desde Lisboa al día siguiente hacia su retiro vacacional donde disfrutó de sus dos semanas de descanso antes de recalar en Donostia. La llegada, el 31 de agosto, acabó de estropearse cuando Silva contrajo el coronavirus y tuvo que estar confinado durante 10 días en el Hotel Costa Vasca sin poder realizar demasiado ejercicio.
Mismo plan que ante el Pucela
Así las cosas, David
Silva sólo realizará cuatro entrenamientos grupales con sus nuevos compañeros además de la sesión individual que completó ayer sobre el verde de Zubieta, tiempo insuficiente para salir de inicio ante el Real Madrid. El de Arguineguín no ha jugado ninguno de los cinco amistosos de pretemporada, por lo que todavía le costará adaptarse y entender los automatismos del juego de Imanol.
El técnico oriotarra planea hacer algo parecido a lo que hizo en el estreno liguero ante el Valladolid. Mikel
Oyarzabal y Adnan
Januzaj, que superaron el coronavirus y no realizaron los entrenamientos necesarios para salir de la partida, se quedaron en la banqueta de Pucela esperando su oportunidad, que llegó en el minuto 78 de la segunda mitad. Ninguno de los dos estaba para jugar los 90 minutos ante el Valladolid.
En esa misma situación está David
Silva, que si no hay imprevistos según avanza la semana, realizará su debut el domingo ante el Real Madrid (21:00 horas). Eso sí, es pronto para que sea titular y por la cabeza de Imanol pasa introducirlo en la segunda parte otorgándole 20-30 minutos.
Source link