Miércoles negro para Iñaki Urdangarin, que ha visto como sus últimos privilegios han sido revocados por la Audiencia de Palma. Desde hacía dos semanas, el yerno de Felipe VI disfrutaba del ansiado tercer grado, que le permitía únicamente ir a prisión para dormir. Sin embargo, el tribunal ha aceptado el recurso impuesto por el Ministerio Fiscal y desde este mismo miércoles vuelve a ser interno de segundo grado. Un duro revés para el exduque de Palma que no ha llegado solo, pues también le ha sido revocado el permiso que tenía y que le permitía salir un fin de semana cada mes de la cárcel.
Han sido un total de veinte días en los que todo apunta a que podría recuperar cierta normalidad en su vida familiar, pero finalmente un juez de Valladolid ha decidido dar marcha atrás. Como Look desvelaba hace unos días, el principal motivo es que genera «alarma social» por dos motivos, los delitos a los que fue condenado, ya que para cometerlos necesitó un «elevado tiempo de planificación» y consideran que el preso aún no se ha rehabilitado para disfrutar del tercer grado. Además, todavía no ha cumplido la condena suficiente para poder disfrutar de la semilibertad pues de manera general, los presos deben dejar pasar la mitad de su condena para acceder al tercer grado.
Seguro que Urdangarin es consciente de ello, pero el julio pasado también lo intentó y, como ahora, también se le terminó denegando. El marido de la infanta Cristina fue condenado a cinco años y cinco meses de prisión por su implicación en el conocido como Caso Nóos y, de momento, lleva cumplidos 2 años y 4 meses, ni la mitad de la condena. Sin embargo, no lo ha perdido todo, pues puede seguir acudiendo como voluntario en el Hogar Don Orione, un permiso especial al que sigue teniendo acceso y al que solo tuvo que renunciar durante el periodo de confinamiento y durante un brote que vivió el centro. Según desvelaba en sus páginas ‘ABC’ a principios de agosto, una decena de los residentes del centro habían dado positivo en coronavirus, aunque casi todos eran asintomáticos. Como prevención, Iñaki Urdangarin se hizo a su vez un PCR que finalmente dio negativo. Una vez recuperado el control, volvió a sus quehaceres.
Este miércoles, Iñaki Urdagarin ha vuelto al Hogar Don Orione, oculto tras una mascarilla blanca y quizás un poco más serio de lo habitual por las dos duras noticias que ha recibido este día.