El entrenador del Celta
de
Vigo, Óscar
García
Junyent, aseguró este sábado que no está “molesto” con los dirigentes del club por la imposibilidad de reforzar aquellas posiciones que pidió antes del inicio del curso liguero.
“Molesto no es la palabra, ni mucho menos”, afirmó el preparador celeste, para quien si por algo ha destacado el Celta “en los últimos diez o quince años” es por su “excelente” gestión económica que le ha permitido ser actualmente ““un club sin deuda”.
En una conferencia de prensa, indicó que el de este años “ha sido un mercado extraño para todo el mundo, pero estoy seguro de que el club está haciendo lo máximo posible” y señaló que si no llegan esos refuerzos “es porque no se puede, no porque no se quiera”.
Estoy seguro de que el club está haciendo lo máximo posible
Dejó entrever rotaciones en El
Sadar porque, como apuntó, sólo ha repetido alineación “una vez”, y subrayó que a lo largo de su carrera nunca le faltó “valentía” para jugar con futbolistas jóvenes y hacerlos debutar.
“Un desafío mayúsculo”
Óscar
García entiende el partido contra el Osasuna como “un desafío mayúsculo” porque su equipo “sólo ha tenido dos días de descanso” después de jugar el jueves contra el Barça, mientras que su rival no ha jugado entre semana por el compromiso internacional del Granada.
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