La secretaria de Energía aseguró que durante el periodo de “reunión de aclaraciones” se analizará el factor de corrupción en el que presuntamente están inmersas las transnacionales.
La secretaria de Energía, Rocío Nahle, manifestó que el proyecto de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, no puede ser otorgado a cualquier constructora, pues se requiere de una especializada; de lo contrario, el plan fracasara.
“No encontramos impecables, pero sí las mejores para el trabajo”, aseguró en entrevista para #AristeguiEnVivo, sobre la invitación extendida por Pemex a Technip, KBR y los consorcios Bechtel-Techint y WorleyParsons-Jacobs.
Aclaró que no duda de los reportes hechos por Forbes, Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad o la revista Proceso sobre los casos de corrupción en los que estarían inmersas las transnacionales, pero justificó que la selección no se hizo basada en que “son la Madre Teresa de Calcuta, pues ninguna empresa constructora en el medio puede estar tan limpia”.
Aclaró que se necesitaba un project manager para Dos Bocas por lo que se buscó a los mejores y más grandes del mundo; sin embargo, señaló que estaría “muy agradecida” de encontrar una empresa que no tenga ningún antecedente.
“Hablamos, en lo personal, con dos o tres dueños de las refinerías donde algunas de estas empresas han trabajado, precisamente para ver qué experiencia técnica y ética han tenido con ellos. Los clientes estaban satisfechos y la mayoría eran clientes privados”, señaló.
“Para hacer una obra de este tamaño se requiere compañías expertas en integración de plantas“, explicó la funcionaria. De acuerdo con el plan del Gobierno Federal, en Dos Bocas se tiene proyectada una refinería de un tren de 340 mil barriles por día de crudo maya.
Por lo tanto, “nos dimos a la tarea de buscar a las empresas que tienen mayor experiencia en la construcción de refinerías, las mejores del mundo porque no queremos que nos dejen obras inconclusas”.
La titular de la Sener manifestó que uno de los factores relevantes que se contempló para no realizar una licitación abierta fue el hecho de que en el pasado, algunas empresas se anotaban con un presupuesto muy por debajo de lo que se tenía contemplado.
No obstante, una vez que ganaban, a los tres o cinco meses, ampliaban el presupuesto y al final la obra se tardaba más o salía al triple.
“Ya tuvimos experiencias muy desagradables en México, en Cadereyta, Tula y Minatitlán, en donde la obra quedó inconclusa”.
El proyecto de la refinería de Dos Bocas, explicó, es un proceso que se ha trabajado desde hace tiempo, de la mano del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) y técnicos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
A partir de ahí, se acordó que la construcción estará acompañada de la Secretaría de la Función Pública (SFP) y además de que se hará a “open-book”, estará administrada y supervisada por Pemex.
“Vamos a cuidar el proyecto, no les vamos a dar manga ancha, el Project Manager es quien coordina el proyecto“, explicó Rocío Nahle.
Detalló que previamente, Pemex contaba con la Subdirección de Proyectos y Construcción de Obras (SPCO) la cual fungía como project manager en la coordinación de proyectos pero que desde 1997 la fueron desmembrando.
Señaló que el siguiente paso consistirá en un periodo de “reuniones de aclaraciones”, que inició el pasado 18 de marzo y se extenderá hasta el 18 de abril, en donde el tema de la transparencia y el combate a la corrupción serán prioridad. “No dudo de las prácticas de corrupción, pero aquí iniciamos una transformación y vamos a cuidar precisamente eso“, dijo.
Durante las reuniones de aclaraciones, Technip, KBR ,Bechtel-Techint y WorleyParsons-Jacobs podrán esclarecer cualquier duda sobre el proceso, antes de que hagan su propuesta financiera. Nahle aseguró que durante ese periodo también se trataran las acusaciones de corrupción.
Ve la entrevista completa, aquí: