Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a un hombre acusado de matar a su pareja sentimental en una vivienda del distrito de Jesús, en Valencia. El suceso ha tenido lugar en la madrugada del jueves, sobre las cuatro, cuando el presunto asesino, de 24 años, ha acabado con la vida de su pareja, de 26 años, según fuentes de Jefatura de la Policía. La posible causa de la muerte ha sido el estrangulamiento.
Las primeras investigaciones apuntan a que la muerte de la joven, de nacionalidad china, se ha producido después de una discusión por celos a raíz de unos mensajes de WhatsApp, según han indicado a Efe fuentes de la investigación. Al parecer, la pareja se conoció por Internet y tras iniciar una relación sentimental se fueron a vivir juntos a una casa de la calle Litógrafo Pascual i Abad.
El sospechoso, de nacionalidad española y origen peruano, fue quien avisó al teléfono de emergencias 112 y a la policía de lo que había hecho. Espero a la llegada de los furgones de la policía y fue detenido pero no tiene antecedentes, según han señalado fuentes policiales. Las autoridades están investigando un posible homicidio por estrangulación. El cadáver de la mujer ha sido trasladado al instituto de Medicina Legal, donde previsiblemente se le practicará la autopsia.
Los vecinos de este barrio obrero no oyeron nada. Les despertó la concentración de coches policiales y el SAMUR a las seis de la madrugada delante de la finca número 15. Una adolescente de 13 años que vive en el piso de arriba fue la única que escuchó gritos ininteligibles alrededor de las cinco de la madrugada. Su madre relata que nunca escucharon discusiones. De hecho, desconocían que tenían vecinos viviendo debajo. “Antes vivía una comunidad china de unas 10 personas. Nos cruzamos con la chica alguna vez, pero no sabíamos que vivía nadie abajo. Mi padre dice que oyó gente que hablaba en castellano y niños”, indica.
Ningún vecino del edificio conocía bien a la víctima. Ni siquiera Raúl Carbonell, 48 años, que vive en la puerta de enfrente. Los golpes de la policía a las seis de la mañana le han despertado para notificarle lo ocurrido. “No he oído ruido ni escándalo”, relata. Pese a ser miembro de la comunidad de vecinos y tener relación con los que llevan varios años viviendo allí, no recuerda haber visto al detenido. “Pensé que vivían dos chicas que me parecieron estudiantes y, aunque eran chinas, me dieron su nombre español. Durante el confinamiento vinieron dos parejas de chinos en coches de gama alta a descargar un montón de víveres y sacos de arroz”, recuerda. El resto de vecinos coinciden con Carbonell en que la víctima llevaba poco más de dos semanas viviendo en el edificio.
De confirmarse los hechos como un crimen machista, se trataría del quinto en la Comunidad Valenciana en lo que va de año. El número de mujeres asesinadas por violencia de género, sin contar este caso, asciende a 33, y desde 2003, año en el que se empezaron a contabilizar oficialmente, son 1.066.
El teléfono 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas y en 51 idiomas. No deja rastro en la factura, pero hay que borrar la llamada del registro del teléfono móvil.