2-0: El Bilbao Athletic coge velocidad de crucero y se coloca líder

Tres victorias seguidas y de cabeza al liderato. Viento en popa. El Bilbao Athletic toma velocidad de crucero a medida que las piezas se van ensamblando. Mostró su versión alegre para tumbar al Alavés B. Desarboló al cuadro babazorro liderado en la medular por Prados y Zarraga, quien bajó un peldaño dado que no hay competición en Primera, y con la movilidad en las medias puntas.

Mal comenzó la tarde para el Alavés B. Jaso, al lanzarse al suelo para despejar el cuero, barrió a Abde. El delantero, que ha firmado dos de los tres goles ligueros de los albiazules, tuvo que marcharse en camilla. El Bilbao Athletic empezó a carburar desde la sala de máquinas gracias a Prados y a Zarraga. Imanol y Williams perdonaron antes del cuarto de hora, pero a la tercera fue la vencida.

Los de Joseba Etxeberria estrenaron el marcador apoyándose en el balón parado en el 16’. Imanol puso una falta en el segundo palo, Williams se sacó un buen remate que Aritz despejó como pudo y Artola anotó a placer. La ventaja hizo crecer aún más a los cachorros. Imanol era un puñal desde la izquierda y los hombres de segunda línea pisaban el área con peligro.

El cuadro visitante despertó a la media hora. Un chut de Sergi García desde fuera del área repelido por Iru fue su primera aproximación de peligro. El Bilbao Athletic perdió algo el control en el centro del campo en el último tramo del primer tiempo y surgieron los espacios. Un ida y vuelta que pudo salir cara… o cruz.

Inicialmente estuvo cerca de encarrilar el triunfo en una contra de cuatro para dos que resolvió Serrano con un zurdazo que desvió el meta babazorro. Un minuto más tarde, la réplica del Alavés B. Aún más clara. Lupu filtró un pase entre líneas para dejar solo a Tirlea ante Iru. No fue la mejor definición del visitante. Raso y abajo. El arquero sacó el balón con el pie.

El Bilbao Athletic arrancó el segundo periodo con la idea de robar y buscar rápido en velocidad a Williams y a Serrano partiendo desde las alas. Mientras tanto, los dirigidos por Iñaki Alonso adelantaban líneas. Un tira y afloja. Necesitaban jugársela en una especie de ruleta rusa, con Lupu moviéndose a la espalda de los centrales. Sin embargo, tenía sus riesgos. Y es que Williams perdonó el segundo tras un pase atrás de Serrano.

Los cachorros se fueron adecuando a lo requería el juego. Había espacios, sí, pero volvían a tener la situación bajo control. Pasada la hora de fútbol, nueva oportunidad clara que tuvo su génesis en una destacada combinación colectiva. Prados dejó solo a Artola, pero se le negó el doblete. Cruzó en exceso. Núñez también tuvo el segundo en un chut que se perdió rozando la madera.

Más difícil todavía para el Alavés B. Jugó en inferioridad numérica los diez minutos finales porque Lupu se retiró por lesión cuando ya había completado los cinco cambios. Luengo, que se llevó la amarilla, le agarró para frenar una contra y el punta se hizo daño en el muslo. Acto seguido, la puntilla bilbaína. Cabo recibió en la media luna, recortó y clavó el esférico en la red con un gran derechazo. Los gasteiztarras pudieron reengancharse al partido, sin embargo la cepa del poste escupió el intento de Llacer. Los tres puntos se quedaron en Lezama.