Uno sale, otro entra

La sorpresa saltó en San Mamés poco después de que el Athletic se hiciera con los tres puntos frente al Elche. Gaizka Garitano, al menos eso parecía, acababa de salvar un nuevo match ball. Nada más lejos de la realidad. El técnico deriotarra estaba sentenciado desde mucho antes de que el balón empezara a rodar en el estadio rojiblanco.

Los responsables del Athletic, con la derrota ante la Real y el rechazo a sus cuentas todavía calentitos, habían movido ficha en secreto para hacerse con los servicios de Marcelino García Toral. Ni el apoyo del presidente Elizegi, ni el del director deportivo Alkorta fueron esta vez suficientes para evitar el relevo en el banquillo. En el club se impuso finalmente la teoría de que el ciclo de Garitano había llegado a su final. Estaba agotado.

Marcelino, visto lo visto, estaba loco por la música. El técnico asturiano, que las ha tenido buenas con el Athletic durante su periplo por otros banquillos de Primera, dejó claro que llega con su equipo de trabajo. De ahí que en la nota de prensa facilitada desde Ibaigane para comunicar la destitución de Garitano se incidiese en que se trataba del míster “y su cuerpo técnico”. Patxi Ferreira y Juan Ángel Iribarren, por lo tanto, también van fuera. Queda la duda de saber qué pasará con Aitor Iru, entrenador de porteros.

Marcelino, dado el calendario que aguarda al Athletic esta semana y a lo largo de todo el mes de enero, tiene que hacerse con las riendas del equipo ya mismo. El miércoles visita San Mamés el Barça en compromiso de Liga aplazado en su día. El sábado toca visita al Atlético de Madrid. La semana que viene semifinal de la Supercopa ante el Real Madrid.

Las declaraciones en rueda de prensa nada más concluir el duelo ante el Elche cobraron horas después cierto sentido. El míster habló sabiendo cuál iba a ser su destino. “Este triunfo por 1-0 supone un alivio total a nivel colectivo y sin más a nivel personal porque, esté o no esté yo, siempre quiero que gane el Athletic. Estamos en un club grande, tenemos mucha presión, nos metéis mucha caña (los periodistas), como debe ser, y sabemos que representamos a un pueblo y jugamos por algo más que fútbol. Esa responsabilidad la tenemos todos. Sabemos que aquí la exigencia es máxima. Hemos ganado un partido que necesitamos ganar”.

El todavía reciente encuentro frente a la Real en San Mamés sirvió, al parecer, para acabar con los apoyos que contaba Garitano dentro del club. La evolución experimentada por el conjunto donostiarra con Imanol y la del Athletic con el técnico deriotarra resultó determinante más allá del propio 0-1. El Bilbao Athletic, curiosamente, derrotó ayer por 3-0 al Barakaldo en Lezama con goles marcados por Zarraga, Paredes y Nico Williams, los tres cachorros que han estado a las órdenes del ya ex entrenador del Athletic en las últimas semanas. Los dos primeros, de hecho, estuvieron por la mañana en el banquillo rojiblanco durante el duelo frente al Elche.

-Septiembre del 2019, al paro-

Marcelino dejó de ser oficialmente el entrenador del Valencia tras la decisión que tomaron a principios de septiembre, en Singapur, Peter Lim y Anil Murthy y que ejecutaron el día 11 de ese mes, apenas unas horas después de aterrizar en Valencia. La destitución de Marcelino, técnico que devolvió al club che a la Champions y que ganó la Copa, salió del club por las desavenencias con los dueños de la entidad.

Ahora, con principio de acuerdo cerrado hasta el 30 de junio de 2022, queda esperar para ver cómo es recibido por la afición rojiblanca porque durante su andadura en otros clubes de Primera mantuvo sus más y sus menos con distintos representantes del Athletic. Surge la duda también de saber si la opción de fichar a Llorente en el mercado de invierno cobra cuerpo. Garitano le quiso y no lo trajeron. A ver qué sucede ahora.

-El mensaje de Muniain-

Muniain aprovechó su cuenta de twitter para despedir al entrenador: “Míster, quería agradecerte todo lo que nos has aportado y ayudado en este tiempo. Todos mis respetos hacia ti. Te deseo lo mejor, de corazón”. El técnico que salvó al Athletic de una situación crítica y le metió en una final de Copa es historia. Marcelino calienta.


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