El Cornellà-Atlético de Madrid de la segunda ronda de la Copa del Rey no estuvo exento de polémica. Algo que con VAR podría haber quedado en nada, pero hay que recordar que esta ‘ayuda arbitral’ no se utiliza hasta más avanzada la competición.
La primera jugada polémica llegó en la primera mitad, cuando un baló colgado del Cornellà impactó en la mano de Ricard, que se encontraba dentro del área en esos momentos. La intención del canterano colchonero no era golpear el esférico con la mano, pero ahí le impactó. Los jugadores catalanes reclamaron la pena máxima.
La segunda acción se dio nada más comenzar la segunda mitad. Vitolo recibió un pase en profundidad y se quedó mano a mano ante Ramón, meta local. Pero antes de que pudiera disparar, el asistente levantó la bandera. Fuera de juego que no fue tal, porque el canario había salio desde su propio campo. Un error grave, porque Vitolo se quedaba en el mano a mano. El canario reclamó enérgicamente esa decisión, pero ya no había marcha atrás.
Después, el Atlético pediría la segunda amarilla para Borja García tras una entrada por detrás del futbolista del Cornellà sobre Correa. No lo vio así Cuadra Fernández que, en cambio, justo después, sí mostró la cartulina a Ricard después de que el canterano dejase el pie a Ramón cuando el meta local ya tenía el balón en su poder. Se quedó con diez el Atlético con casi media hora de partido por delante.
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