“No es algo que solo haga Ciudad de México, sino que se hace en otros lugares del mundo”, expresó la jefa de Gobierno.
El cierre de restaurantes no es una imposición, sino una medida sanitaria que está establecida en el semáforo rojo, que es un acuerdo entre todos los gobernadores y la Secretaría de Salud. Lo que estamos buscando es disminuir contagios para poder abrir las actividades económicas lo más rápido posible, manifestó la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum ante el amago de la industria restaurantera de abrir sus puertas pese a que no son considerados como esenciales.
“Hemos dicho, y no es un dicho de la jefa de Gobierno, sino un difusión de lo que dicen los artículos científicos, que el mayor número de contagios se da en lugares cerrados donde no se usa cubrebocas y se pierde la sana distancia. Por eso hablamos de fiestas, reuniones familiares y particularmente de algunos establecimientos como los restaurantes”, señaló en videoconferencia de prensa.
“No es algo que solo haga Ciudad de México, sino que se hace en otros lugares del mundo y también evidentemente quisiéramos no hacerlo, pero estamos tomando una serie de políticas para disminuir contagios en la ciudad y evitar que sigan llegando personas graves a los hospitales”.
Te puede interesar: Restauranteros piden ‘ruta de sobrevivencia’ a las autoridades: Giulliano Lopresti
La mandataria capitalina refirió que en caso de que los restaurantes reanuden operaciones con gente al interior, en primer lugar se les hará un apercibimiento, pero si continúan con el mismo comportamiento serán acreedores de sanciones, suspensión de actividades o multas.
Al mismo tiempo, sostuvo que va a haber más vigilancia por parte de las alcaldías para que en el caso del comercio en vía pública sea solo con la entrega de la comida y la gente no permanezca en el lugar.
“No es un tema de una política aislada, el objetivo que tenemos todos y todas, Iniciativa Privada, Gobierno y ciudadanía es disminuir hospitalizaciones graves”, expresó
Te puede interesar: Restauranteros desafían el Semáforo Rojo: Galván Ochoa | Video
Sheinbaum Pardo insistió en que hay partidos que quieren politizar la situación que está viviendo CDMX con la pandemia; no obstante, atajó que su administración no entrará en ese debate.
“Es nada más cuestión de leer las redes sociales de otros partidos políticos que en su momento pidieron que se pusiera el semáforo rojo y luego piden que se abran las actividades económicas”, expuso.
Adelantó que este lunes a las 6 de la tarde, Fadlala Akabani, secretario de Desarrollo Económico, y el titular de la ADIP, José Peña Merino, se reunirán con restauranteros con el fin de explicarles que la decisión tomada es con el objetivo de que no haya contagios.
Te puede interesar: No hay manera de considerar como esenciales a los restaurantes: Sheinbaum
En entrevista para Aristegui en Vivo, el empresario Giulliano Lopresti –propietario del restaurante Quebracho– aseguró que los restauranteros piden al gobierno de la capital “una ruta jurídica” que les permita operar en semáforo rojo, porque ya llegaron “al límite” de su capacidad económica. “Esta clarísimo, después de tres semanas, que los contagios siguen subiendo. No es casualidad que en el clímax de los contagios llegamos al límite. Estamos en el peor momento”, dijo.
Lopresti comentó que los empresarios del sector han ofrecido diálogo a las autoridades de la ciudad para llegar a un acuerdo que permita la apertura de los restaurantes: “Tuvimos una reunión la semana pasada con tres secretarios, se presentó una propuesta muy seria por parte de las cámaras y lo que estamos pidiendo es una ruta de sobrevivencia. No es un tema de tener utilidades”.
Este lunes, cerca de 500 restauranteros anunciaron la apertura de sus locales, mediante una iniciativa llamada #AbrirOMorir, difundida a través de las redes sociales. Lo anterior, pese a la prohibición de las autoridades capitalinas, ya que la ciudad se encuentra en semáforo rojo debido a la pandemia de Covid-19.