“La FGR informa que la conclusión de lo que hizo, sus investigaciones, los elementos que proporcionó la defensa, pero sobre todo lo que proporcionó Estados Unidos, no hay manera de vincular a proceso al general Cienfuegos, es más en México ni siquiera lo habrían podido detener, de acuerdo a la ley vigente”, expresó el canciller.
“En esta tribuna dije que para México sería impensable, suicida, no hacer nada, pero ojo, lo que hizo la Fiscalía General de la República fue citar a comparecer a Salvador Cienfuegos Zepeda. Lo que informa la FGR es que de los elementos que proporcionó el fiscal de Estados Unidos confrontados con los de la defensa de Cienfuegos e investigados por el Ministerio Público, no hay elementos para sustentar la causa en contra del general”, señaló el canciller Marcelo Ebrard Casaubón en conferencia matutina.
Lo anterior lo dijo, luego de que en noviembre del 2020, tras la llegada de Cienfuegos Zepeda a México, él mismo expresó que sería “casi suicida” traer al exsecretario de la Defensa Nacional a territorio mexicano y no hacer nada, porque para eso mejor se hubiera quedado en Estados Unidos, donde fue detenido.
Sin embargo, este viernes, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) manifestó que no es que no se haya hecho nada por parte de la FGR.
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“Sí se hizo. ¿Para tener credibilidad tiene que haber una condena? No. ¿Qué dijo el presidente, qué dijo el fiscal? Vamos a investigar los elementos que nos mandaron y vamos a llegar a una conclusión, la que sea”, subrayó.
“La FGR informa que la conclusión de lo que hizo, sus investigaciones, los elementos que proporcionó la defensa, pero sobre todo lo que proporcionó Estados Unidos, no hay manera de vincular a proceso al general Cienfuegos, es más en México ni siquiera lo habrían podido detener, de acuerdo a la ley vigente”, apuntó.
Previamente, Ebrard Casaubón hizo una relatoría de hechos desde que México se enteró de la detención del militar. Indicó que en un primer tramo la actuación del Estado mexicano, por conducto de la SRE y del consulado de Los Ángeles, se basó en asegurar que el general tuviera la representación legal y el debido proceso.
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“Costó trabajo y muchas horas, cosa inusual desde que se efectuó la detención, pero finalmente pudimos garantizar en ese tramo esto”, refirió.
Posterior a esto, pidió una llamada con el fiscal norteamericano, William Barr; tuvo una reunión con el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau; y se envió una nota diplomática.
“Manifestamos nuestra inconformidad porque una operación de esta naturaleza se haya llevado a cabo sin conocimiento de las autoridades mexicanas dada la relevancia de la persona sujeta a esa aprehensión. Y siguió la reflexión entonces con quienes hablé de decir ‘si México y Estados Unidos son aliados en la lucha contra el narcotráfico, ¿cómo puede ser esto compatible con que detengas a un alto oficial sin previo conocimiento y acción conjunta con tu aliado?’ Eso no es una alianza en ningún país del mundo”, argumentó.
“La lucha contra el narcotráfico en México son miles de muertos y no solo por razón de una alianza estratégica entre ambos países, sino por todo lo que le ha costado a México este tema. México tenía todo el derecho y Estados Unidos tenía la obligación de haber compartido esa información y no lo hizo. Eso es un antes y un después, primer punto que se hizo notar”.
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El funcionario comentó que la respuesta por parte de las autoridades estadounidenses versó los cargos criminales muy delicados que había contra Cienfuegos Zepeda, por lo que el planteamiento mexicano fue que se compartieran los elementos que se tenían, ya que México no consentiría en ser cómplice, callar y no hacer nada sobre ello en caso de que se hubieran cometido ilícitos y protegido a la delincuencia al más alto nivel.
“Son hechos que ponen en peligro o pueden poner en peligro toda la estrategia de seguridad en México”, les expuso.
Indicó que posterior a esto, el fiscal general William Barr se comprometió a mandar todos los elementos, los cuales fueron copias fotostáticas de las carátulas de celulares con intercambios de información.
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“Ahí manifestamos que en México con estos elementos enviados no podríamos nosotros sujetar a proceso, es decir, lograr que un juez de control vinculara a proceso a un detenido. Entonces, me comunicó ‘vamos a enviar a Cienfuegos a México para que ustedes hagan la investigación y proceso’”, añadió.
El canciller señaló que una vez que recibió el expediente del Gobierno de Estados Unidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador le ordenó entregarlo al fiscal Alejandro Gertz Manero, así como la relatoría de las llamadas que el canciller tuvo con el fiscal Barr.
“¿Qué nos informó la FGR? ¿Qué dice el boletín? Se llamó a comparecer al general Cienfuegos, se le hizo de su conocimiento el expediente, se valoró por la FGR lo dicho, establecido en esos documentos que nos mandaron y verificaron los elementos que se describen y se le dio oportunidad al general de defenderse”, acotó.
“Sí se hizo el proceso de investigación, ¿ya concluyó?, no. ¿Qué se deriva de este boletín? Hay otros elementos importantes que se deben investigar, pero lo que hace al general Cienfuegos hoy, con todos los testimonios, no hay elementos para iniciar acción penal en su contra o determinar algún tipo de decisión procesal vinculada a proceso, esa es la verdad”.