La Moncloa confirma oficialmente las previsiones. Este martes se celebrará el último Consejo de Ministros con Salvador Illa como responsable de Sanidad. El también secretario de organización del PSC dejará el Gobierno, en el que lleva poco más de un año, para concentrarse en la campaña electoral catalana del próximo 14-F, donde será el candidato de los socialistas catalanes. El ministro confirma así una decisión muy polémica, la de dejar el Ejecutivo en plena tercera ola de la pandemia para ser el cabeza de lista de su partido. Illa cumple así su anuncio de apurar como ministro hasta el inicio de la campaña electoral, que llegará el jueves.
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Este miércoles tomará posesión su sucesora, con toda probabilidad la canaria Carolina Darias, ministra de Política Territorial, que ya ha tenido mucho protagonismo en los últimos meses en la gestión de la crisis del coronavirus y lleva muchas semanas compareciendo casi siempre con Illa tras las reuniones del comité interterritorial de salud o en la crisis con Madrid. Fuentes del Gobierno apuntan a Miquel Iceta como el sustituto de Darias al frente de Política Territorial, aunque no hay confirmación oficial de los nombramientos hasta que no los anuncie el presidente. El relevo se producirá este mismo martes tras el Consejo de Ministros y las tomas de posesión llegarán el miércoles.
El veterano Iceta ha estado en varias ocasiones en las quinielas como posible ministro pero finalmente fueron primero Meritxell Batet y después Illa quienes ocuparon ese puesto de miembro del Gobierno que representa de alguna manera al PSC. Todo indica que ahora le toca al líder de los socialistas catalanes, que mantiene su puesto de primer secretario aunque parece evidente que con la candidatura de Illa se ha iniciado un relevo en el liderazgo.
Lo que no está previsto entre las fuentes del Gobierno consultadas es un cambio que vaya más allá de este retoque interno y la entrada de Iceta. Unidas Podemos, que tiene cinco ministros, no tiene previsto aprovechar este cambio para relevar a ninguno de los suyos. Y Sánchez tampoco parece dispuesto a mover nada más de un Gobierno que acaba de cumplir un año, aunque el corazón del Ejecutivo ya venía de la anterior etapa, cuando el PSOE gobernaba en solitario tras la moción de censura, y por tanto buena parte de los ministros llevan dos años y medio al frente de sus departamentos, algunos de ellos con fuertes polémicas y un importante desgaste a sus espaldas.
Podemos, socio de Gobierno del PSOE, ha criticado este lunes la elección de Illa como candidato a la Generalitat. “En un momento tan difícil, no debería abandonar su responsabilidad”, ha asegurado la portavoz de la formación, Isa Serra, que ha advertido de que “la gente podría llegar a pensar que se están poniendo por delante los intereses electorales y electoralistas frente a proteger la salud de la ciudadanía”, informa Inés Santaeulalia. Jaume Asens, presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos y persona de confianza de Ada Colau, líder de los comunes, ha criticado que Illa se vaya antes de comparecer en el Congreso esta semana, como estaba previsto, y ha pedido que se retrase la salida para que pueda acudir a la Cámara baja. No parece probable que Illa retrase su cese, ya decidido por Sánchez, pero su candidatura ya empieza a generar una tensión interna entre dos socios de Gobierno que también son rivales electorales en Cataluña.
La decisión de Pedro Sánchez de mantener a Illa al frente de Sanidad hasta el último momento ―su candidatura se anunció el 30 de diciembre― ha sido muy polémica y muy criticada por la oposición. Pero La Moncloa señala que “se cumple así el calendario previsto, que pasaba por la salida de Illa del ministerio antes de que el próximo viernes comenzara la campaña electoral”.
Illa ha mantenido este lunes su agenda como ministro y ha visitado con el presidente la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. “El presidente y el ministro, acompañados por la directora de este organismo, María Jesús Lamas, dirigirán a los funcionarios y trabajadores de la Agencia un mensaje de agradecimiento por su importante labor, fundamental desde el primer momento en la lucha contra la pandemia y ahora en la puesta en marcha del plan de vacunación contra la Covid-19″, señala La Moncloa.
Ese mensaje al final se ha convertido en un reconocimiento a la labor de Illa, que ha hecho el presidente flanqueado por Darias, en un nuevo gesto claro de sucesión controlada. “Ha sido un gusto poder trabajar contigo. Entiendo tu decisión, el desafío es apasionante y complejo pero muy necesario para Cataluña en la labor de reencuentro que necesita. Tienes virtudes de liderazgo basadas en la humildad. Solo te puede desear suerte y trasladarte la eterna gratitud como servidor público. Sin ti y muchos de los presentes que han trabajado en el ministerio de Sanidad en este tiempo, todo hubiese sido muchísimo más complejo. Mucho ánimo, mucha fuerza”, lanzó Sánchez, principal responsable de la estrategia de lanzar a Illa como candidato.
Illa apura sus horas en el Gobierno antes de iniciar una atípica campaña electoral para intentar con su irrupción que el PSC vuelva a ser el primer partido en Cataluña al menos en votos, algo que hace unas semanas parecía totalmente inalcanzable pero ahora las encuestas lo señalan como factible, aunque nada sencillo. En cualquier caso, incluso aunque gane, tendría muy difícil gobernar porque necesitaría los votos de ERC, que difícilmente apoyaría o permitiría una investidura de un socialista en vez de un independentista. De hecho la candidatura de Illa ha tensado mucho el pacto entre el PSOE y ERC, un partido que fue clave en la investidura de Sánchez y lo ha vuelto a ser en los Presupuestos.
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