Como dicen que mientras hay vida, hay esperanza, el Sheffield United no piensa bajar los brazos aunque todo apunta a que solo un milagro evitará su descenso a la Championship al término del presente curso. El conjunto dirigido por Chris Wilder logró este miércoles tres puntos balsámicos al imponerse al Aston Villa gracias a un solitario tanto de McGoldrick (1-0). No le vale abandonar el farolillo rojo y ve la zona de salvación a 12 puntos, que pueden ser hasta 15 cuando se equiparen los partidos disputados por unos y otros en esta Premier League, pero algo es algo. Los ‘villanos’, por su parte, echaron en falta en exceso al lesionado Jack Grealish.
Para ser justos a la hora de explicar lo acontecido sobre el verde del emblemático Bramall Lane, cabe destacar que el Aston Villa hizo méritos suficientes como para no marcharse de vacío del mismo, pero los Bertrand Traoré, El Ghazi, Watkins y compañía no mostraron la determinación que tiene Grealish, y esta circunstancia se tradujo en que los de Dean Smith encajasen una derrota inesperada.
El único tanto del encuentro llegó en el 30’, y aconteció con cierto aroma de casualidad. Baldock, carrilero derecho del Sheffield United, protagonizó una buena acción individual con ‘pseudobicicleta’ incluida, y su disparo, que pretendía encontrar la portería, se convirtió en una asistencia para McGoldrick, atento en el segundo palo para fusilar a Emiliano Martínez.
A partir de ahí el Aston Villa metió una marcha extra, y durante el segundo acto asedió a Ramsdale, portero del Sheffield United. Más si cabe a partir del minuto 57, cuando el VAR intervino para expulsar a Jagielka. Pero los de Chris Wilder, con el central Ampadu especialmente inspirado, supieron aguantar el 1-0 para que los tres puntos se quedasen en Bramall Lane. Puede que no valgan para evitar el descenso. Eso el tiempo lo dirá. Pero cuanto menos lo retrasará. El Sheffield United, por ahora, se agarra a una Premier League que no quiere abandonar.
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