El baloncesto es ese deporte en el que, ante la duda, dicta sentencia Lillard. Así fue anoche en el Moda Center de Portland, donde Damian Lillard decidió el encuentro que enfrentó a los Blazers con Golden State Warriors con un triplazo para ganar por 108 a 106.
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Lejos de cuajar su mejor actuación individual, el base apareció cuando más se le necesitaba para salvar a su equipo y anotar la canasta ganadora. Quedaban poco más de 10 segundos en el reloj cuando Lillard decidió que ya había visto suficiente. Encaró desde el lateral y se elevó para encestar el triple final.
No obstante, hasta llegar a ese momento el partido dio mucho de sí. Ambos equipos llegaron al encuentro con varias bajas pero la misma urgencia por lograr el triunfo. Nadie quería irse al parón del All Star con una derrota bajo el brazo.
Steph Curry lideró a los suyos una noche más, logrando 35 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y 3 robos de balón. Su carta de tiro, lejos de ser la mejor de su carrera, respondió a las necesidades del equipo: 28 tiros lanzados (13 anotados) para llevar el peso ofensivo de los Warriors.
Los que no terminaron de responder fueron Andrew Wiggins y Kent Bazemore, su pareja anotadora de la noche. Se quedaron en 14 y 12 puntos, respectivamente, una contribución pobre que no valió para asegurar la victoria. Draymond, con 9 rebotes y 12 asistencias, volvió a tener uno de sus partidos tipo.
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En Portland no brilló Lillard. O al menos, no hasta que fue la hora de la verdad. El base estuvo bastante discreto hasta los últimos minutos y en su lugar destacaron otros compañeros. Como Enes Kanter, que sigue aprovechando la baja de Yusuf Nurkic para sumar números. Anoche terminó con 11 puntos y 14 rebotes en 23 minutos.
Carmelo Anthony también está en un gran estado de forma. El alero acabó con 22 puntos desde el banquillo, anotando 8 de sus 13 tiros en otra demostración de eficiencia y compromiso. Sus tiros mantuvieron con vida a Portland hasta el final.
Y Lillard acabó sumando 22 tantos, aunque estuvo más fallón de lo habitual. Anotó 6 de sus 17 lanzamientos pero metió el más importante y suyos fueron los últimos 8 puntos de los Blazers. Ese triple final que valía un triunfo para los suyos.
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