Marcelino
García
Toral ha citado a sus jugadores el 7 de julio para dar comienzo a la pretemporada después de pasar los dos días anteriores los pertinentes exámenes médicos previos a cualquier fase de preparación. El entrenador asturiano cogerá el equipo desde un inicio, a diferencia de la campaña que acabó el pasado 22 de mayo con la derrota en Elche, cuando se hizo cargo de los rojiblancos con la entrada de 2021 tras la destitución de Gaizka
Garitano después ganar precisamente a los ilicitanos en San Mamés (1-0).
El míster de Villaviciosa podrá trabajar durante algo más de cinco semanas de cara al torneo de la regularidad que dará comienzo el fin de semana del 14 y 15 de agosto, según las fechas que se manejan de forma oficiosa y que aún tienen que confirmarse de manera oficial.
“Prácticamente la totalidad de nuestras experiencias indica que la segunda temporada es mejor que la primera. Creo que en todas ellas, porque solo en algunas hubo ciertos condicionantes por los que no se trabajó en las mismas condiciones. Los hechos son los que van a ser capaces de demostrarnos si vamos a ser mejor equipo. Si en mi cabeza no estuviera la absoluta seguridad de que tenemos que mejorar los números de esta temporada, creo que lo mejor sería no empezar. Si empezamos es porque tenemos dentro de nosotros ese convencimiento de que el equipo va a competir a un muy buen nivel y esperemos que todos estemos satisfechos de su comportamiento”, señaló antes de afrontar la última cita liguera.
Prácticamente la totalidad de nuestras experiencias indica que la segunda temporada es mejor que la primera
El asturiano mejoró considerablemente los resultados en su segundo año en sus dos últimas experiencias en un banquillo antes de hacerse cargo del Athletic. Con el Valencia finalizó la temporada 2017-18 en cuarta posición y cayó en semifinales de la Copa ante el Barça. Al siguiente, el equipo che terminó en el mismo puesto de Champions, pero la mejora vino sobre todo en el torneo del KO y Europa. En el primero quedó campeón ganando al equipo azulgrana en la final contra todo pronóstico (1-2) y llegó a semifinales de la Europa League (fue eliminado por el Arsenal) después de caer en la fase de la grupos de la máxima competición continental. Todo un temporadón. Diferencias con el propietario del club provocaron su destitución a la campaña siguiente con solo tres partidos de Liga jugados.
Cuatro años en el Villarreal
En el Villarreal completó un ciclo de casi cuatro años, su periodo más prolongado al frente de un equipo al margen de su etapa en el Sporting, en el que se formó como entrenador después de su paso por el Lealtad en Tercera. Ascendió a los amarillos a Primera en la campaña 2012-13 y en la 13-14 logró un más que meritorio sexto puesto y cayó en octavos de Copa. Un buen balance para el equipo castellonense después de haber peregrinado durante un año por la división de plata del fútbol estatal. Marcelino mejoró los números en su tercera temporada en el Submarino Amarillo, la segunda en la máxima categoría. También fueron sextos en la 2014-15, se quedaron a las puertas de jugar la final del KO (también les eliminó el Barça) y llegaron hasta octavos de la Europa League.
En el Sevilla solamente estuvo una temporada (2011-12). Fue destituido después de jugar 21 encuentros de Liga, caer en octavos de Copa y en la fase previa de la Europa League ante el Hannover. Monchi, el director deportivo que ha marcado una época en el club hispalense por su capacidad para fichar futbolistas baratos y de buena calidad, afirmó posteriormente que se sentía responsable de su cese. “No fui capaz de hacer una plantilla acorde a los perfiles que Marcelino necesitaba. No hice algo clave en la tarea de un director deportivo, la de no interpretar lo que un entrenador quiere. Marcelino es un entrenador top, de los mejores de España. Aquí tuvo que ser cesado a los seis meses”, señaló el exguardameta.
El actual técnico del Athletic dirigió al Racing durante dos campañas separadas en el tiempo, 2007-08 y 2010-11, ambas en la máxima categoría. En la primera de ellas clasificó al equipo cántabro para la UEFA por primera vez en su historia y alcanzó las semifinales de Copa también por primera vez. En la segunda cogió al equipo tras la destitución de Miguel
Ángel
Portugal, le salvó del descenso a Segunda pero abandonó el cargo ya finalizada la temporada por discrepancias con el dueño del club, el empresario Ahsan
Ali
Syed.
Al Zaragoza le ascendió a Primera en el curso 2008-09 y al año siguiente fue destituido precisamente tras perder ante el Athletic el 12 de diciembre de 2009. Con el Recreativo también logró plaza en Primera en la campaña 2005-06 y al año siguiente logró un buen octavo puesto.
El entrenador de Villaviciosa tendrá la oportunidad de hacer bueno el pronóstico sobre sus segundas temporadas el curso próximo en el Athletic. En el anterior ha tenido de todo. Hizo campeón al equipo bilbaíno de la Supercopa nada más llegar, le clasificó para la final de Copa, pero tuvo una trayectoria muy irregular en la Liga y sufrió dos decepciones importantes en las finales del KO.
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