SAITAMA, Japón. — Marco Asensio salió de la banca para poner el gol que a España tanto se le negaba. Y les dejó más cerca del segundo oro en el fútbol masculino de los Juegos Olímpicos.
Gracias a un golazo del delantero del Real Madrid, España derrotó con sufrimiento a Japón 1-0 y se citó con Brasil en la final de Yokohama, el sábado. La Verdeamarela derrotó horas antes en una tanda de penales 4-1 a México, después que el tiempo reglamentario y una prórroga terminaron en un empate sin goles.
España, que llegó a Tokio con seis jugadores que alcanzaron las semifinales en el pasado Campeonato Europeo, irá por su segunda consagración después de conseguir su primer oro hace 29 años en los Juegos de Barcelona, mientras que Brasil buscará revalidar el título que ganó con Neymar en Río 2016. El astro del Paris Saint-Germain no fue convocado para la competencia.
“A este nivel es prácticamente imposible ganarle con una contundencia … y tanta diferencia. Aquí todo está muy igualado”, declaró el técnico español Luis de la Fuente. Además, “soy un ferviente convencido que el sufrimiento es un valor añadido a este gran equipo”.
La “Verdeamarela” hizo valer su papel como Campeón olímpico en penales y dejó al Tri sin Oro o Plata en estos Juegos Olímpicos.
Asensio cerca del final del tiempo reglamentario cuando España no encontraba la forma de llegar al gol. Lo buscó desde el vamos con tres atacantes, entre ellos Rafa Mir, que inició como titular gracias a su triplete que marcó en la victoria sobre Costa de Marfil 5-2 en un choque de cuartos que se fue a un alargue.
En momentos en que Japón sofocaba la zona española, Asensio apareció con su joya, que inició en un saque lateral del capitán Jesús Vallejo a Mikel Oyarzabal. Éste cedió a Asensio, quien dentro del área amansó el balón antes de sacar un zurdazo cruzado, batiendo la inútil estirada del portero Kosei Tani. Corrían 115 minutos de partido.
“Ha hecho lo que tenía que hacer”, dijo de la Fuente. “Es un gran futbolista”.
Pese a dominar la posesión del esférico desde el inicio, el equipo español no pudo concretar las contadas ocasiones de peligro que generó en la primera parte. Oyarzabal tuvo una clara a los 31 minutos al recibir un pase en el borde del área, pero su remate de primera se fue ligeramente arriba de la portería.
Japón copó el mediocampo y salió con un sólo delantero — Daichi Hayashi — y optó por rápidos contragolpes esporádicos. En uno de ellos a los 55, una desatención de España casi le cuesta caro cuando Daichi Hayashi le ganó la espalda a la defensa y sacó un zapatazo desde el borde del área que se fue por encima del travesaño tras un pase al centro de Ritsu Doan.
El árbitro peruano Kevin Ortega descartó después un penal del defensor Maya Yoshida contra Mikel Merino tras consultar el VAR. También retiró una tarjeta amarilla que le había sacado al capitán japonés.
Japón volvió a exigir a Unai Simón en una de sus subidas a los 78, pero el arquero del Athletic Bilbao tapó pegado a su segundo palo el remate de zurda a Takefusa Kubo.
En los minutos finales, remates de Oyarzbal y Mir no pasaron a más y España debió irse al alargue. “Ha sido un partido de un alto nivel”, estimó el entrenador español. “Ha habido momentos de un buen juego, mucha tensión, nadie quería perder, nadie quería arresgar demasiado”.
La Roja se salvó a los 12 minutos del primer tiempo extra con un cabezazo del recién ingresado delantero Daizen Maeda que pasó pellizcando el travesaño, y luego pasó sofoco en su zona con remates seguidos de los anfitriones que se estrellaron en la defensa. Acto seguido apareció la zurda de Asensio.
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