El ex cofundador de Jolla, Marc Dillon, tiene un nuevo trabajo en hardware: la startup finlandesa Asmo, que ha sido crowdfunding un cargador de móvil que se apaga automáticamente cuando el dispositivo está completamente cargado, tiene hoy nombrado Dillon como su nuevo CEO.
El cargador Asmo, que tiene como objetivo reducir el desperdicio de electricidad y reforzar la seguridad con una solución automática para el problema de los cargadores móviles que se dejan enchufados de forma rutinaria, se lanzó como un crowdfunding el verano pasado. Continuó recaudando más de $90,000 a través de la Indiegogo plataforma: financiación que desde entonces se ha triplicado gracias a la financiación de los fundadores, la inversión privada y los fondos empresariales del gobierno para destinarlos a I+D.
La fecha límite original de envío programada de octubre de 2015 para Asmo se ha retrasado varios meses. Ahora dice que está “finalizando la fabricación” y anunciará una fecha de entrega “pronto”. Antes de contratar a Dillon, el fundador Asmo Saloranta señala que estaba trabajando solo en el proyecto, por lo que aportó algunos conocimientos experimentados en hardware móvil en este momento.
“Ahora tenemos el equipo para entregar a nuestros patrocinadores y clientes”, dice Saloranta en un comunicado.
Desde que dejó Jolla el otoño pasado, Dillon ha trabajado con otra campaña de financiación colectiva, aunque el proyecto Unseen Art, cuyo objetivo era hacer que las obras de arte famosas fueran accesibles para las personas ciegas y deficientes visuales como objetos 3D táctiles que podrían descargarse como archivos 3D e imprimirse a través de una impresora 3D impresora, no logró su objetivo de financiación de 50.000 dólares.
Su financiador colectivo anterior, Jolla Tablet, superó su objetivo de financiación, pero el envío de la pizarra se ha retrasado mucho y desde entonces se ha topado con rocas en otro sentido: Jolla confirmó esta semana que está acabando con la tableta.
Solo alrededor de 540 unidades ahora se enviarán a los patrocinadores, a partir de este mes, y el resto recibirá reembolsos, aunque el proceso de reembolso puede demorar hasta un año. Dillon había dejado Jolla antes de que la compañía anunciara las dificultades de financiación que finalmente llevaron a que la tableta se descarrilara.
Source link