El histórico Spartak Moscú, el equipo con más aficionados de Rusia y que recientemente cumplió 100 años, coquetea con el descenso a falta de cuatro jornadas para el final del campeonato de liga.
Después de caer en casa con el Rostov de Valeri Karpin, el equipo moscovita es décimo con 31 puntos, tres más que el antepenúltimo clasificado, el Khimki.
El Spartak fichó al técnico italiano Paolo Vanoli en el mercado de invierno, después de destituir al portugués Rui Vitoria por los malos resultados.
Entonces, el Spartak era noveno con 23 puntos y se había clasificado para los octavos de final de la Europa League como primero de grupo tras derrotar al Nápoles en ambos encuentros.
El equipo ha sumado únicamente ocho puntos en las últimas ocho jornadas, mala racha sólo aliviada por la clasificación la pasada semana para las semifinales de Copa.
El Krilia Soviétov, su próximo rival
En las próximas jornadas el Spartak se enfrentará al Krilia Soviétov, equipo revelación de la temporada y que es séptimo; al Ural, que es tercero por la cola; recibirá al Zenit, actual líder; y en la última jornada viajará a Khimki, que también se está jugando la vida.
Una liga en los últimos 20 años
El Spartak, equipo patrocinado por la petrolera Lukoil, ha ganado una sola liga rusa en los últimos 20 años.
Precisamente, con otro pupilo de Antonio Conte en el banquillo, Massimo Carrera, el equipo moscovita logró su último título en la temporada 2016-17.
El Zenit, que tiene un partido menos, es líder del campeonato ruso con tres puntos de ventaja sobre el Dinamo Moscú, que cayó el domingo en el estadio del CSKA.