Sumó los tres puntos el Aston Villa, pero en realidad fue más una victoria para el Leeds y el Everton. El conjunto dirigido por Steven Gerrard, que afronta el tramo final de la temporada en zona de nadie, se hizo fuerte para imponerse a domicilio al Burnley (1-3), que junto a los anteriormente mencionados se encuentra inmerso en la lucha por eludir el descenso y llegaba a este duelo tras tres triunfos consecutivos y haber sumado 10 puntos de los últimos 12 posibles.
El Aston Villa ni siquiera necesitó de un Coutinho que fue suplente y no entró en el terreno de juego hasta el minuto 80. De hecho, cuanto el brasileño pisó el verde los ‘villanos’ ya vencían por 0-3 después de que durante la primera mitad hubiesen visto puerta tanto Danny Ings asistido por Buendía (7′) como el propio trequartista argentino (31′) para encarrilar la victoria visitante y de que Watkins, ya en la segunda parte, hubiese firmado el tercero de cabeza a centro de McGinn desde la banda izquierda (52′).
No obstante, y pese al tanteo en el marcador, lo cierto es que el partido, en cuanto a méritos realizados, no fue tan desequilibrado como pudo parecer. De hecho, lo que marcó la diferencia fue tanto la efectividad del Aston Villa como el hecho de que el Burnley se mostró agarrotado desde el minuto 7 en el que se vio por debajo en el marcador. Tan solo le alcanzó para marcar el gol del honor, obra de Cornet, ya en el añadido.
Tras esta derrota, el Burnley pasó a mirar de reojo a lo que hagan el Everton y el Leeds United en sus partidos de este domingo ante el Leicester y el Arsenal (ambos a domicilio) respectivamente.