De luchar por no descender de categoría a aspirar al título de la de la Copa de la Reina. La trayectoria del Sporting Huelva ha ido esta temporada de menos a más para convertirse en la auténtica revelación del torneo copero, un conjunto por el que pocos apostaban pero que se ha plantado en la final y ahora espera rival: Barça o Real Madrid.
El equipo que dirige Antonio Toledo ya sabe qué es ganar una Copa. Lo hizo en el año 2015 tras una apretada final contra el Valencia, a quien derrotó contra todo pronóstico, dejando por el camino a Atlético y Rayo Vallecano.
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Este martes, un gol de Patri Ojeda a falta de 20 minutos para el final permitió al conjunto andaluz vencer al Granadilla Tenerife en las semifinales disputadas en el Estadio de Alcorcón y acceder a la gran final de este domingo, la segunda de su historia.
El Sporting Huelva tiró de efectividad para mantener vivo el sueño de la Copa tras una temporada de altibajos, en la que ha tenido que sufrir para salir adelante. Y es que a mitad de temporada, las de Antonio Toledo estaban inmersas en plena lucha por no bajar de categoría.
Precisamente el 6 de febrero, con dos golazos de Anita Marcos, las andaluzas ganaban por 2-0 al Athletic Club para encadenar tres victorias seguidas y salir de la zona de descenso. Desde entonces, han ido de menos más hasta acabar la Liga en décima posición y meterse en la lucha por el título copero por méritos propios.