Nancy Pelosi, la única mujer que ha ocupado el rol de líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, fue elegida este jueves para el cargo nuevamente, convirtiéndose así en uno de los pocos legisladores que repiten la posición.
Pelosi, que fue líder de la mayoría de 2007 a 2011, recibió 220 votos en la votación del jueves entre los miembros de la Cámara. La última vez que líder recuperó el mazo fue hace más de medio siglo.
“Esto no está rompiendo un techo de cristal, está rompiendo un techo de mármol en el Capitolio de Estados Unidos”, dijo Pelosi en una entrevista del programa “Hoy” que se emitió el jueves por la mañana.
La llamaron una “legisladora legendaria” cuando el representante Hakeem Jeffries, demócrata de Nueva York, la nominó para la posición.
“Permítanme ser claro, los demócratas de la Cámara de Representantes están abatidos con el Partido Nacional Demócrata: Nancy D’Alesandro Pelosi, la única y futura líder”, dijo Jeffries.
Al aceptar el mazo, Pelosi dará un guiño a la nueva era de gobierno dividido, comprometiéndose de “llegar al otro lado de esta cámara y a través de las divisiones en esta gran nación”, según extractos de sus comentarios preparados el jueves.
“El piso de esta Cámara debe ser el town hall de Estados Unidos: donde la gente verá nuestros debates y donde sus voces serán escuchadas y afectarán nuestras decisiones”, dijo.
Al previsualizar las prioridades demócratas, habla sobre la reducción de los costos de atención médica, la inversión en infraestructura ecológica y la “restauración de la integridad” del gobierno. “Debemos ser campeones de la clase media y todos aquellos que aspiran a ella, porque la clase media es la columna vertebral de la democracia”, agregó.
Los republicanos nominaron al representante Kevin McCarthy, también de California, para dirigir su partido.
Pelosi sabía que este momento llegaría, incluso si los demás tuvieran sus dudas, o trabajaran para detenerla.
La demócrata de California ha pasado su carrera política siendo subestimada, solo para probar que los detractores están equivocados. En este caso, fue recuperando la mayoría demócrata y acumulando los votos para el puesto del líder de la mayoría.
“Ninguno de nosotros es indispensable”, dijo Pelosi a The Associated Press en la campaña electoral del otoño pasado, “pero sí sé que soy muy buena en lo que hago”.
Pelosi sigue siendo una figura altamente polarizadora, vilipendiada por los republicanos como una liberala de San Francisco y una caricatura del gran gobierno. Pero también es madre de cinco hijos y abuela de nueve que rompió las barreras para convertirse en uno de los políticos más poderosos del siglo XXI.
Con el presidente Donald Trump en la Casa Blanca y los republicanos aún controlando el Senado, el regreso de Pelosi a la oficina para liderar a una mayoría demócrata con una gran cantidad de legisladores primerizos desde Watergate, sacudirá la dinámica en Washington incluso más allá de la nueva era de gobierno dividido.
Pelosi es uno de los pocos líderes del Congreso que parecen entender a Trump, ya que ambos son hijos de familias famosas que ahora están preparados para negociar. Trump aprecia a los personajes fuertes y, tal vez en señal de respeto, Pelosi es uno de los pocos líderes del Congreso en Washington a los que el mandatario no ha dado un apodo.
Cuando le preguntaron “Hoy” si ella cree que Trump tratará de manera diferente con una mujer, Pelosi dijo: “No tengo idea. Veremos cómo tratará a los oradores de la casa … Espero que reconozca que ha comenzado un nuevo día en Esstados Unidos.”
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