El entrenador del Real Madrid, Chus Mateo, espera que la derrota de su equipo este miércoles en el Palau Blaugrana (71-69), que empató la final de la Liga Endesa, sea una “herida” que les ayude “a jugar mejor el próximo partido”.
“Ha sido un partido muy disputado, donde ambos sabíamos que había que poner energía, ir con intensidad, y eso ha prevalecido por encima del acierto. Hemos metido poco. Y ambos hemos dado pocas asistencias, porque así es complicado hacer circular el balón”, resumió el técnico blanco desde la sala de prensa.
Mateo subrayó la constancia de sus jugadores: “Hemos iniciado el partido con muy buena mentalidad. No es fácil ganar aquí. Hemos tenido la opción, incluso en algún momento el Barça ha cogido una ventaja y hemos sido capaces de volver”.
“Creo que estamos en un buen momento, a pesar del enfado de haber encajado la derrota. La intensidad es irrenunciable. Somos ambiciosos y eso demuestra nuestro carácter. La herida de no habernos llevado el partido, nos ayudará a jugar mejor en el próximo”, aseguró el preparador madridista.
Mateo se centra ahora en el tercer encuentro, el viernes en la capital española: “Esperamos salir fuertes en Madrid e intentar sacar el primer partido adelante. Es una lucha entre dos equipos que pelean al máximo, que están exigiendo lo mejor de cada uno de los jugadores”.
Pese a los 26 puntos del azulgrana Nikola Mirotic, el técnico del Real Madrid reivindicó la defensa de su equipo: “Cuando te enfrentas a un ‘superclase’, no es fácil atarlo en corto. Hemos hecho lo que hemos podido para que sus porcentajes como equipo fueran bajos”.
“Creo que hemos defendido bien y nos ha faltado un poco de la fluidez ofensiva que tuvimos en el primer partido. Sabíamos que iban a ser más duros”, concluyó.