El club AS Saint-Étienne ha sido penalizado con seis puntos, tres de ellos en suspensión, en la próxima temporada y tendrá que jugar seis partidos a puerta cerrada debido a los incidentes que se produjeron el 29 de mayo en el partido contra el Auxerre.
Las violentas imágenes de ese partido circularon por todas las televisiones. Numerosos aficionados del club se echaron al campo con palos y bengalas que llegaron a lanzar contra los jugadores.
La Liga de Fútbol Profesional francesa considera que los disturbios fueron suficientemente graves para sancionar al equipo verde con seis puntos de penalización la próxima temporada, tres de ellos en suspensión a la espera de que no reincida, según anunció la Liga este jueves.
Además su estadio, el Geoffroy-Guichard, no podrá acoger público en los primeros seis partidos que se juegue allí en la temporada 2022-2023, que empieza a principios de agosto.
El club ha adelantado que no apelará la sanción dada la gravedad de los actos.
“El club hace un llamamiento a la responsabilidad de todos para que estos actos incalificables no se vuelvan a reproducir en el Geoffroy-Guichard”, publicó la dirección del equipo, que recordó que estas acciones pusieron en peligro a algunas personas, entre ellas niños y discapacitados.
“Difundidas en el mundo entero, esas imágenes han dañado con fuerza la imagen del club”, añade el AS Saint-Étienne en un comunicado.