En apenas 43 minutos, el pasado 28 de marzo, se agotaron todas las entradas para la final de la Eurocopa Femenina que se celebrará en el mítico estadio de Wembley, con capacidad para 90.000 espectadores. Es tan solo un dato, muy revelador, de la tremenda expectación que ha generado la 13ª edición del torneo continental que acoge Inglaterra del 6 al 31 de julio con las mejores estrellas europeas en liza y con vistas a batir nuevos registros de audiencia, impacto mediático, público en los estadios, reparto de premios por parte de la UEFA y apuesta de las marcas y patrocinadores.
Va a ser la Euro de los récords, de la eclosión definitiva de un fútbol femenino en pleno auge, que parece no tener techo. La final no es el único partido que se ha quedado sin entradas. También se colgó el ‘sold out’ del Inglaterra-Irlanda del Norte en el Saint Mary Stadium a cien días de su disputa. El país británico se ha volcado en un evento que se tuvo que suspender el pasado año a causa de la pandemia del covid y que, tras una larga espera, espera convertirse en una cita histórica.
La hora de la Roja
Y entre tanta expectación, se abre camino con discreción pero con gran ambición la selección española. Si bien Jorge Vilda no se ha cansado de rebajar la euforia durante estos últimos días – “no somos favoritas porque todavía no hemos ganado nada”, ha reiterado el seleccionador- lo cierto es que es imposible no soñar con levantar el título viendo el equipazo que presenta la Roja.
De entrada, España llega a la Euro como invicta en la fase de clasificación, con unas cifras de escándalo: quedó campeona del Grupo D con siete victorias, un empate y ninguna derrota y con 48 goles a favor y solo uno en contra. De hecho, las de Vilda encadenan ya 23 partidos sin perder, 20 de ellos resueltos con victoria.
Los números avalan a un bloque que cuenta con una base formada por el poderoso Barça que quedó subcampeón de la Champions League y con la reciente Balón de Oro, Alexia Putellas, como líder indiscutible y mayor reclamo para los aficionados. A todo ello, jugadoras del Real Madrid, Atlético de Madrid y Athletic Club representan a una Liga española que puede presumir de estar entre las mejores del mundo, a la altura de la Premier, la Bundesliga y la Ligue 1 francesa.
Buen ambiente en el entrenamiento
Ciertamente, si bien España es firme candidata al título, sería injusto colgarle el cartel de favorita tan alegremente cuando aún no ha ganado ningún trofeo internacional. Sus actuaciones en la Eurocopa han sido más bien discretas hasta ahora: de las doce ediciones celebradas, ha participado en cuatro alcanzando las semifinales en la Eurocopa de Noruega y Suecia 1997, los cuartos de final en la Eurocopa de Suecia 2013 y los cuartos de final en la Eurocopa de Holanda 2017.
“Nuestra sensación es de ilusión. No hay presión, hay ganas. Nos hemos ido preparando para la Eurocopa durante todo el año. Nos podemos permitir soñar con levantar el título”, aseguraba Patri Guijarro (Barça), sin ningún complejo. Su compañera Aitana Bonmatí le secundaba: “No puedo decir que somos favoritas, pero nuestra ambición es ganar la Eurocopa”. Así, mientras la consigna es mantener los pies en el suelo, a nadie escapa que el sueño de la Euro está más vivo que nunca.
En todo caso, selecciones como la Noruega de Ada Hegerberg y Caroline Graham Hansen, la anfitriona Inglaterra con Lucy Bronze en estado de gracia, los Países Bajos de Vivianne Miedema y Lieke Martens y la poderosa Alemania, ganadora de ocho títulos en doce ediciones, se presentan como rivales a batir y a suceder a las holandesas en el palmarés.
La centrocampista española Patricia Guijarro pelea una posesión con la delantera de Dinamarca Pernille Harder
España ha quedado encuadrada en el Grupo B, podría decirse que ‘el grupo de la muerte’, con Alemania, Dinamarca y Finlandia como rivales. El debut de la Roja será el 8 de julio (18h) ante las finlandesas, seguido del 12 de julio (21h) ante las germanas y el 16 de julio (21h) ante las danesas.
La UEFA duplica los premios
Inglaterra se ha vestido de gala para acoger el torneo, en diez sedes repartidas en nueve ciudades. El legendario Old Trafford acogerá el partido inaugural, el 6 de julio, entre la anfitriona Inglaterra y Austria. Será el inicio de un torneo con sedes en Brighton & Hove, Londres, Manchester, Milton Keynes, Rotherham, Sheffield, Southampton, Trafford y Wigan & Leigh. La gran final se celebrará en el majestuoso Wembley como colofón a una Euro que quiere marcar la eclosión definitiva de este deporte.
La UEFA no es ajena a este crecimiento imparable y ha movido cartas en el asunto con decisiones sin precedentes. Hace pocos días anunciaba que duplicará el premio total en metálico de la Eurocopa, cuyo campeón podrá obtener un total de 2.085.000 euros si gana todos sus partidos de la fase de grupos, y compensará por primera a los clubs por liberar jugadores.
Todo está a punto para ver en acción a las mejores futbolistas europeas del momento. En España se verán todos los partidos en directo por Teledeporte y en el resto del mundo, a través de la ESPN.
La noruega Ada Hegerberg está llamada a ser una de las protagonistas de la Eurocopa de Inglaterra
Se repite el formato de 16
El formato se repite por segunda edición seguida: el torneo contará con 16 equipos divididos en cuatro grupos de cuatro selecciones, en los que los dos mejores de cada zona avanzarán a cuartos de final. Los de las zonas A y B se enfrentarán entre ellos y lo mismo con los de las zonas C y D. En caso de empate en la fase de eliminación directa, habrá prórroga antes de pasar al desempate por penaltis.
Todo está a punto para ver en acción a las mayores estrellas del momento. Los goles de la estrella del Manchester City Ellen White con Inglaterra, el regreso de la noruega Ada Hegerberg que reaparece dispuesta a recuperar su trono tras haber renunciado a jugar con su selección como protesta por la desigualdad salarial y de recursos con sus homólogos masculinos, la fuerza y potencia de Sara Dabritz con Alemania, el talento descomunal de Pernille Harder con Dinamarca o el reencuentro del Barça con la holandesa Lieke Martens son alicientes sobrados para no perderse esta cita. Sin contar con las estrellas del Barça, con Alexia Putellas, Aitana Bonmatí, Mapi León o Patri Guijarro en cabeza, que se quieren quitar la ‘espina’ de haber dejado escapar la reciente Champions ganando un título del calibre de la Eurocopa.
La Euro, en última instancia, quiere poner de relieve que el fútbol femenino no es un ‘boom’ pasajero sino un deporte en pleno crecimiento que ha venido para quedarse. El espectáculo está servido.