Los hidratos de carbono son las moléculas de carbono, hidrógeno y oxígeno que proporcionan energía a los seres vivos. También se denominan carbohidratos, azúcares, sacáridos, glúcidos o almidones.
Los carbohidratos son metabolizados fácilmente y proporcionan energía rápida, pero un consumo elevado puede causar obesidad. No obstante y aunque no son considerados nutrientes esenciales, una falta de ellos puede provocar desnutrición.
Clasificación de los hidratos de carbono
Los hidratos de carbono se clasifican, según sus volúmenes estructurales, en simples o complejos.
los carbohidratos simples son fácilmente absorbidos y tienen un alto índice glucémico (aumentan de forma rápida los niveles de azúcar en la sangre), lo que puede causar una disminución del metabolismo y un aumento de peso.
Es el caso de los dulces, el azúcar, la miel, los refrescos, las galletas empaquetadas, los zumos de fruta procesados y la comida rápida, entre otros alimentos, los cuales contienen: Glucosa, Galactosa, Fructuosa, Maltosa y Sacarosa.
Los hidratos de carbono complejos tienen una absorción lenta y ayudan a regular el tránsito intestinal y la microflora, así como eliminar el exceso de líquido en el cuerpo. Generalmente, mantienen la mucosa gástrica y ayudan a mejorar la digestión.
Estos carbohidratos dan una mayor sensación de saciedad, mantienen por más tiempo la energía y ayudan a conservar la masa muscular.
Es el caso de los cereales integrales y sus compuestos, las pastas, las legumbres, las verduras de hoja, los vegetales con almidón (patatas, calabaza, maíz), entre otros, los cuales contienen: Fibra, Almidón, Glucógeno y Peptina.
Otra clasificación de los hidratos de carbono se basa en su cantidad de moléculas. Según esta, pueden ser monosacáridos (con una sola molécula), disacáridos (formados por dos monosacáridos), oligosacáridos (de tres hasta nueve monosacáridos cíclicos) y polisacáridos (con más de diez monosacáridos).
Se considera que una dieta libre de carbohidratos puede dar resultados rápidos, pero no se puede bajar de peso de forma saludable sin carbohidratos.
En una dieta para adelgazar, la deficiencia calórica es un factor principal, pero debe existir un adecuado equilibrio de proteínas, grasas y carbohidratos.
Cuando comemos, el páncreas activa la producción de insulina, que procesa el azúcar (que proviene principalmente de carbohidratos) a los músculos, para proporcionar energía. Pero si sobran azúcares, estos se convierten en grasa.
Por ello, es preferible optar por los hidratos de carbono complejos y de lenta absorción. Estos contienen más vitaminas, más fibra y proporcionan una sensación de saciedad durante más tiempo, lo cual ayuda a reducir los antojos entre las comidas y evita comer en exceso.
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