Un flojo PSG gana por la mínima al Brest

El PSG sigue intratable en liga, aunque a veces simplemente cumple con lo justo. Contra el Brest fue una faena burocrática, una gestión un tanto perezosa, pero fueron tres puntos más que le afianzan en el liderato (1-0). El tanto de Neymar en el primer tiempo resolvió un choque en el que se percibió el desgaste del equipo entre semana, aún de resaca tras un triunfo frente a la Juve que volvió a colocarle entre los candidatos al trono continental.

Tras el glamour de la Champions, al PSG le costó encontrar la motivación contra el Brest. Como avanzó en la previa, Christophe Galtier hizo dos cambios en su once habitual. El francés dio descanso a Marquinhos y a Nuno Mendes, pero la rotación aún no afectó a Mbappé, Neymar y Messi. El primer tiempo, gris, no invitó al aplauso. El Brest se defendió con uñas y dientes, encerrado a la espera de sorprender al contragolpe.

Hubo una acción que pudo cambiar el guion del partido. El árbitro expulsó a Hérelle tras una falta al ser el último hombre en una jugada de vértigo del PSG, pero el VAR observó a posteriori que Neymar arrancó en fuera de juego. El brasileño se desquitó poco después gracias a una asistencia de Messi al espacio. El control exquisito de Neymar fue medio gol. Durmió el balón, lo acarició con la diestra y ejecutó con la zurda: 1-0.

Apenas amenazó el Brest en una tarde destemplada, con poco ritmo. El marcador, exiguo, obligó al PSG a no abandonarse. Entre tanto, siguió el gafe de Messi de cara a puerta. El argentino ha perdido la cuenta de las veces que ha rematado a la madera desde que llegó al PSG. Desafortunado en esa faceta, volvió a dar con ella después de rematar con la testa un centro con mimo de Mbappé. A Leo, otra vez, le falta un punto de suerte.

A pesar del 1-0, el Brest, más conservador, mantuvo las líneas juntas ante un PSG con problemas en el juego interior. A la hora de partido, Christophe Galtier le dio la alternativa a Fabián Ruiz en lugar de Verratti. La falta de concreción del cuadro local tuvo castigo: una falta imprudente de Kimpembe en el área emplazó a Donnarumma a lucirse. El italiano, acertado, le detuvo el penalti a Slimani. Sin nada que perder, el Brest se desperezó en el último cuarto de hora.

A pesar de que el PSG no respiró tranquilo hasta el final, Christophe Galtier no cambió su hoja de ruta. A un cuarto de hora para el final del partido sustituyó a Mbappé y a Neymar, pero dejó a Messi sobre la cancha. La gestión de los minutos no se negocia sino que es obligatoria para llegar en las mejores condiciones al momento cumbre de la temporada. El triunfo no fue brillante, ni siquiera notable, pero las matemáticas son las que cuentan. El PSG vuelve al liderato.