La Premier League deparó un partido entre dos de los equipos más alegres del campeonato y no decepcionó. El Crystal Palace sacó adelante el encuentro sin respiro frente al Leeds (2-1).
Del centro del campo de ambos equipos no hubo noticias en cuanto a juego posicional. Todo el partido fue un constante ataque vertical, al espacio, con el equipo en bloque… Vamos, lo que es el fútbol inglés de toda la vida, aunque si que es verdad que jugando más por el suelo. La única pega al duelo fue que esa profundidad no se concretara en más oportunidades, pero es que ambas líneas defensivas también rindieron a buen nivel.
Fue el Leeds el que golpeó primero Aaronson hizo un jugadón a lo Messi. Entro en el área tras dejar atrás a varios rivales y lamentablemente estrelló su disparo a la madera. Por fortuna para Jesse Marsch, el rebote cayó en botas de Struijk, que no falló (10′).
No obstante, la razón fue cayendo del lado del Palace, que fue algo mejor en sus ataques gracias a la presencia de jugadores determinantes como Zaha, Olise y Eze. Eso sí, el empate llegó en la estrategia. Olise puso un centro con canela y por allí apareció Edouard para remachar con un cabezazo picado (24′).
Con el paso de los minutos, el equipo de Patrick Vieira cada vez jugó más en campo rival y el gol solo hacía que hacerse esperar. Llegó de botas de Eze, en una jugada en la frontal tras un par de amagos culminada con un tiro cruzado (76′).
Quiso pelear el Leeds por devolvérsela, pero la defensa del cuadro londinense estuvo estoica y no se movió el marcador.