Ya hay decisión del Comite de Competición sobre el delantero del Mallorca, Muriqui. Y se confirma la noticia que ya contamos ayer en este periódico. El jugador ha sido sancionado dos partidos por el órgano disciplinario.
Ya explicamos ayer que el acta del Valentín Pizarro no daba más opciones. El colegiado madrileño la redactó así:
“En el minuto 85 el jugador (7) Muric , Vedat fue expulsado por el siguiente motivo: Golpear a un adversario con su mano en la cara estando el balón en juego, pero no a distancia de ser jugado.”
A tenor de la redacción, el Comité de Competición se ajusta al artículo 130 del Código Disciplinario relativo a la violencia en el juego:
“Producirse de manera violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, siempre que la acción origine riesgo, pero no se produzcan consecuencias dañosas o lesivas, se sancionará con suspensión de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes”.
Esencialmente al segundo párrafo donde añade que “Si la acción descrita en el párrafo anterior se produjera al margen del juego, no estando en posibilidad de disputar el balón o el juego detenido, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos”.
Además, como ya contamos ayer, ya había precedentes esta misma temporada donde en situaciones similares, el jugador ha sido sancionado con dos encuentros. El último el danés del Espanyol, Martin Braithwaite. Así pues el delantero kosovar no estará ante el Sevilla y Real Sociedad.
En el caso de Lucas Boyé, ha sido sancionado con sólo un solo encuentro.
Por otra parte, Ruben Peña tampoco podrá jugar los dos próximos compromisos ligueros con el Osasuna, tal y como ha determinado el Comité de Competición de la RFEF y después de su expulsión en los instantes finales de encuentro de la pasada jornada . Algo que el colegiado Ortiz Arias dejó así explicado en el acta arbitral:
“En el minuto 90 el jugador (15) ,Peña Jiménez, Rubén fue expulsado por el siguiente motivo: Ser culpable de conducta violenta, consistente en dar una patada a un adversario en su espalda con el juego detenido y sin opción de jugar el balón.”
El órgano federativo de la RFEF se ha amparado en el artículo 130 relativo a la violencia en el juego donde dice que “Producirse de manera violenta con ocasión del juego o como consecuencia directa de algún lance del mismo, siempre que la acción origine riesgo, pero no se produzcan consecuencias dañosas o lesivas, se sancionará con suspensión de uno a tres partidos o por tiempo de hasta un mes.”
En este caso, específicamente en su apartado relativo a aquellas situaciones donde el balón no está disputa, como sucedió en la acción del jugador del equipo navarro y cuya redacción literal es la siguiente: “Si la acción descrita en el párrafo anterior se produjera al margen del juego, no estando en posibilidad de disputar el balón o el juego detenido, se sancionará con suspensión de dos a tres partidos”. Luego esto implica que no podrá estar ante el Villarreal y Espanyol pudiendo regresar ante el Girona.
En el caso de las otras dos expulsiones, tanto Unai García como Diakhaby han sido sancionados con un partido.