El jugador de banda ha declarado este miércoles en rueda de prensa que el Ludogorets búlgaro, su rival de mañana (18:45h), ”más que sorpresa, es un gran equipo”. Tiene mucho mérito que se haya colado en la lucha por estar en la siguiente fase en una pelea que parecía destinada a Betis y Roma. El conjunto de Mourinho está en serios apuros.
Así, Ruibal espera “a un rival duro, como se pudo ver en Sevilla”, donde el Betis sufrió mucho para ganar 3-2, y advirtió que “en su campo van a apretar”, por lo que “habrá que estar al tanto porque tienen jugadores buenos arriba y son peligrosos”, aunque el Betis va a “salir a ganar” a pesar de que le basta un empate para garantizarse matemáticamente la primera plaza del grupo.
El futbolista lamentó ”el viaje largo” que tendrán que hacer para disputar el partido. Un viaje que puede afectar tanto en Europa League como contra la Real Sociedad el domingo en Anoeta (21:00h). Aunque ha querido ensalzar lo ”bonito” que es tener este problema ya que significa ”que estás jugando en Europa y eso nos pone contentos”.
Ruibal ha retrasado en los últimos partido su posición para jugar de lateral derecho, lo que le “da igual” puesto que “lo importante es jugar donde el equipo lo necesite” y aunque ha “jugado siempre arriba”, debe “aprovechar” el poderse “adaptar a otros puestos”, para lo que recibe los consejos de su amigo Héctor Bellerín, compañero suyo la pasada temporada y actualmente en las filas del Barcelona.