La NBA logra suscitar emociones y momentos únicos y enternecedores como ninguna otra liga o campeonato y por eso está también a otro nivel. Como el nivel en el que se mueven un tipo de la calidad de DeMar DeRozan y otro de la caballerosidad de Gregg Popovich.
El alero de los Chicago Bulls alcanzó los 20.000 puntos en su carrera en el partido de esta noche contra los San Antonio Spurs, que se impusieron por 129-124. Justo en el momento de llegar a la cifra, el legendario técnico de los Spurs, Gregg Popovich, pidió tiempo muerto para que el público reconociera el hito de DeRozan a pesar de tratarse de un rival. El alero de los Bulls se fundió con Popovich en un abrazo.
Antes de recalar en los Bulls, DeRozan fue durante tres años jugador de la franquicia de Texas, con lo que coincidió con ‘Pops’. “Es una de los mejores jugadores que he entrenado, un ser humano extraordinario”, dijo tras el partido Popovich, quien alcanzó anoche otro hito, aunque por lo que más se recordará esta pasada madrugada es por su cautivador gesto de cortesía.