El Burgos asaltó Las Palmas (0-2) para birlarle el liderato al equipo canario y conservar así la vitola de equipo de moda de Segunda División. El conjunto burgalés ha conseguido mantener en 12 ocasiones de 14 la portería a cero, sólo ha perdido un partido y ha encajado tres goles en total.
No falta quien le acusa de ser extremadamente defensivo, ya que sus porcentajes de posesión de balón suele ser bajos, pero en este eterno debate hay opiniones para todos los gustos y al final la que cuenta es la del entrenador y sus resultados. Tras el choque en Las Palmas, Julián Calero, que en su día fuera asistente de Fernando Hierro en la selección española que jugó el Mundial de Rusia de 2018, dio una lección de fútbol de minuto y medio en la que explicó la diferencia entre jugar bien y jugar bonito. Imperdible e impecable su discurso.
No fue lo único destacado que dijo Calero. También se refirió al liderato y buen momento de su equipo: “Hay que tener calma. Cuando las voces suban, aquí estoy yo para bajarlas. Los pies en el suelo y a seguir trabajando sabiendo quiénes somos. El día que pierdes tu identidad, lo pierdes todo, no en el fútbol, sino en la vida”, comentó.