El Nápoles, líder de la Serie A, va lanzado hacia el que sería el que sería el tercer ‘scudetto’ de su historia (tras los de 1986-87 y 1989-90 con Diego Armando Maradona) y este sábado lo volvió a demostrar ganando al Atalanta, segundo clasificado, en Bergamo (1-2). Así, el equipo de Luciano Spalletti es más líder y tiene ocho puntos más que el Atlanta. El Milan (3º) juega este mismo sábado ante el Spezia.
El Atalanta empezó muy bien y durante el primer cuarto de hora le creó numerosos problemas al Nápoles. Los de Gian Piero Gasperini se adelantaron incluso tras un penalti por mano de Victor Osimhen a la salida de un córner. Lo transformó Ademola Lookman, que estaba creando mucho peligro, en el minuto 19.
Lo cierto es que, de la misma manera en que cometió la pena máxima, después Osimhen lideró la remontada en un encuentro en que el Nápoles no contó con Khvicha Kvaratskhelia, estelar este curso y que fue baja por unas molestias.
Así, Osimhen niveló el marcador en el 23′ tras recibir un pase de Piotr Zielinski y sirvió a Eljif Delmas el pase del que fue el gol del triunfo napolitano en el 35′. Estelar el atacante nigeriano.
El Atalanta apretó mucho en la segunda parte en busca de al menos el empate, pero el Nápoles resistió. Es un equipo muy sólido en todas sus líneas, defensa, centro del campo y ataque. Incluso sin Kvaratskhelia, pieza clave para Spalletti y ya codiciado por muchos clubs grandes.
Giovanni Simeone entró por Osimhen en el 75′ y estuvo cerca de marcar el tercer tanto del Nápoles, que entró en octavos de Champions como primero del grupo A, por delante del Liverpool. Este lunes sabrá quién es su rival en esta próxima ronda. Fue la segunda derrota en la presente Serie A del Atalanta. El Nápoles permanece invicto.