El Udinese, que fue una de las revelaciones del inicio de campaña, no pudo pasar del empate a uno con el Spezia en un partido equilibrado pero en el que pudo llevarse los tres puntos con un disparo al larguero en el tiempo añadido.
Seis jornadas sin ganar en la Serie A, con un bagaje de cinco empates y una derrota, y una eliminación en la Copa de Italia de por medio ante el Monza evidencian la mala dinámica de un Udinese que llegó a ir tercero pero que desde hace un mes se ha desinflado poco a poco hasta caer a la octava plaza con 24 puntos, a uno de los puestos europeos, pero con un partido más.
Del 0-1 anulado por el VAR al 1-0
El VAR anuló un tanto del nigeriano Isaac Success en el minuto 20 y ya dejó ver que no sería una noche afortunada para el Udinese, que pasó del posible 0-1 al 1-0 tras encajar un gol del polaco Arkadiusz Reca en el minuto 33.
El esloveno Sandri Lovric consiguió igualar la contienda solo diez minutos más tarde para evitar encarar el túnel de vestuarios al descanso por debajo en el marcador.
Salió mejor el Udinese en la segunda mitad, más reconocible, similar al Udinese que fue en las primeras jornadas, intimidante bajo el liderazgo del español Gerard Deulofeu, menos participativo que de costumbre, bien marcado por la zaga.
Larguero en el descuento
Sin embargo, los locales aguantaron las embestidas e incluso gozaron de buenas ocasiones para llevarse los tres puntos, aunque dieron por bueno el empate tras el susto final tras el zapatazo del brasileño Walace desde fuera del área que se estrelló en el larguero.
Los de Udine se mantienen octavos con 24 puntos, mientras que el Spezia se coloca decimosexto con 10 unidades.