Que Jan Oblak es uno de los mejores porteros del mundo es algo que muy pocos pueden poner en duda. El meta del Atlético de Madrid lo ha demostrado a lo largo de todos estos años con sus actuaciones en el cuadro colchonero. Los títulos que acumula con el equipo rojiblanco, además de las distinciones individuales así lo acreditan.
El esloveno ha sido cinco veces Premio Zamora al menos goleado de LaLiga (2016, 2017, 2018, 2019 y 2021). Algo que le equipara con los únicos dos arqueros que lo han logrado en toda la historia de la competición, con Víctor Valdés y Antoni Ramallets. Si el arquero colchonero lograse uno más, se quedaría como el guardameta con el mayor número de galardones individuales de nuestro fútbol.
Que el meta es un portento con las manos ya lo sabe todo el mundo, lo que no todos saben es que se defiende, pero que muy bien, con los pies. Así lo dejó ver en uno de los entrenamientos de los últimos días. Es una auténtica rareza que los arqueros se unan a los rondos de los jugadores de campo, a pesar de que sería un gran ejercicio para ellos porque necesitan pensar rápido y tener toque de balón en su trabajo en este fútbol moderno en el que el arquero es un apoyo más para construir desde la defensa o para desahogar una determinada zona. El caso es que muy pocas veces se ve y cuando se ve, merece la pena fijarse en cómo lo hacen.
Y como se puede ver en el video de Mundo Deportivo que acompaña esta información, no lo hace nada mal. El esloveno sorprendió a todos con su rapidez mental y de piernas para participar en el rondo, en el que pocas veces marró un pase y encontró siempre un compañero. Muchas veces sin complicarse, porque para él es clave en la zona en la que se mueve, pero otras con una visión realmente sorprendente. No desentonó para nada. Si Simeone necesita un nuevo centrocampista quizás Oblak sea una opción…